Los trabajadores sociales de la Dirección General de Vivienda de la Junta de Extremadura están en estos momentos reuniendo todos los datos sobre las situación de las dos familias enfrentadas de la barriada pacense de Los Colorines, una de las cuales ha solicitado que la Junta permute su vivienda social por una en otra ciudad, por miedo a las amenazas de muerte que le han dirigido los miembros de la otra familia, contra la que tienen una orden de alejamiento.

Fuentes de la Consejería de Fomento señalaron ayer que en estos momentos no descartan ninguna actuación, incluso la de concederles una vivienda en otra localidad, "siempre que se den las condiciones". Las mismas fuentes aseguraron que "en los próximos días" tomarán una determinación, una vez que estudien la situación para no cometer ninguna injusticia.