En los pasillos del López de Ayala se oye que el nivel de las murgas es superior al de ediciones anteriores. Voces y letras cada vez más depuradas y trajes y escenografías cuidadas al detalle, por regla general, ponen de manifiesto que los grupos que se suben al escenario son como el buen vino: mejoran con el tiempo. Este año, veteranos y novatos pugnan por salir airosos de su cita con el público. A partir de las diez de la noche de hoy será el jurado, entre las ocho finalistas, quien decida qué murga es la ganadora del concurso 2004.

Letras

Como la actualidad manda, las letras de los murgueros se centran en temas que han despertado el interés público en los últimos meses. Así, ninguna murga ha pasado por alto la boda del príncipe y la relación de su prometida, Letizia Ortíz, con Extremadura o los escarceos amorosos y monetarios de la Pantoja y el ex-alcalde de Marbella, Julián Muñoz.

En temas locales, además de las canciones dedicadas a las aficiones del alcalde o las letras sobre el tandem Cristina Herrera-Alejandro Ramírez del Molino, la nueva fuente de los Tres Poetas ha sido protagonista indiscutible. El Museo del Carnaval, los contundentes avisos de las cajetillas de tabaco, los fallos del jurado en la pasada edición del concurso --incluso hubo quien le lanzó calculadoras-- y la guerra de Irak han sido otros de los temas más oídos en el López.

Pero también se ha cantado mucho a Badajoz, a su Carnaval, a su casco antiguo, al Guadiana y a los pacenses. El teatro ha colgado el cartel de completo casi todos los días de concurso y un público entregado ha animado a sus murgas favoritas.