THtace unos días fui al aeropuerto a recoger a un familiar que venía a pasar unos días a Badajoz. Como me gusta ser puntual y procuro que nadie me espere, me fui con tiempo suficiente para ver llegar el avión, recoger al familiar, que por cierto venía con un niño de un año, y volverme a casa.
Tengo la costumbre de nada más entrar en un aeropuerto bien para tomar un vuelo o para recoger a alguien, mirar los paneles para ver si salen o llegan a tiempo los aviones. En este caso hice lo mismo y como no había información, me acerqué al mostrador a preguntar a la señorita que si el avión procedente de Madrid estaba en hora.
Cuál no fue mi sorpresa, aunque no sé por qué me sorprendí, cuando la señorita a la que me dirigí me informó de que por problemas técnicos, que no me creí, el vuelo venía con retraso pero que no sabía nada más. En resumen, el avión, en este caso, sí llegó a Badajoz, pero con dos horas de retraso.
Según mi opinión, lo que debió ocurrir fue lo siguiente: como no tenían lleno el avión de Badajoz decidieron hacer otro vuelo más rentable y dejaron para más tarde el de Badajoz.
Si el motivo del retraso es el que me imagino, me parece una falta de vergüenza y una desfachatez, pues a esta compañía la subvencionamos todos los extremeños para que hagan vuelos a Madrid y a Barcelona, con lo cual deberían ser prioritarios.
¿Qué desarrollo económico vamos a querer para Extremadura? ¿Cómo van a llegar los empresarios dispuestos a invertir en nuestra región? ¿Cómo van a llegar los posibles turistas? si por carretera se tarda al menos cuatro horas, en tren cerca de siete y el avión viene cuando le parece.
Todos los partidos políticos deberían hacer un frente común para exigir al Gobierno central que las comunicaciones en Extremadura mejoren sustancialmente y será la única forma de que nos pongamos en el mapa, tanto de España como de Europa.
