Los empresarios que han obtenido la licencia del Ayuntamiento de Badajoz para poner en marcha los dos primeros negocios de ocio en cinco de los locales del río, no van a ponerse a trabajar de momento hasta que no obtengan los permisos que ellos han solicitado, y que no se corresponden con el de café-bar, sino que ellos han pedido licencias para un pub y un café concierto, según declaró ayer a el PERIODICO uno de los socios, Carlos Cayuela.
Este empresario explicó que ayer por la mañana fueron al ayuntamiento a por la licencia, que había sido concedido el día anterior en la Comisión de Urbanismo. Cuál fue su sorpresa al comprobar que no correspondían a sus solicitudes. La diferencia está en que un pub y un café concierto pueden poner música y su horario es distinto, pues cierran más tarde.
"Yo no quiero servir cafés ni poner tapas, yo sé servir copas", señaló Cayuela y recalcó que mientras no obtengan la licencia solicitada, los locales permanecerán cerrados, "y los utilizaremos como trasteros, no como ellos --el ayuntamiento-- quieran".
