Esta semana los integrantes del Pacto Social y Político por el Ferrocarril han decidido que los extremeños tenemos que volver a salir a la calle para reivindicar la mejora de nuestro ferrocarril y la llegada del AVE a Extremadura. Será el próximo 18 de noviembre en Cáceres, coincidiendo con el aniversario de la histórica manifestación que el año pasado tuvo lugar en Madrid.
¿La manifestación tenía que haber sido de nuevo en Madrid como reclama el Partido Popular de Extremadura? Independiente de la intencionalidad política del PP extremeño contra el gobierno central, ahora en manos socialistas, creo que la protesta extremeña en Madrid hubiera tenido más resonancia y, quién sabe, incluso más seguimiento dado el nivel de indignación de los extremeños en estos momentos.
Cierto que una concentración como la que miles de extremeños protagonizamos el año pasado necesita tiempo y dinero para organizarse. Obstáculos, en todo caso, salvables. Pero había que buscar la necesaria unidad y la opción de volver a Madrid no hubiera conseguido el apoyo de la mayoría de los integrantes del Pacto. Y una vez más vuelve aparecer la política.
Por tanto la protesta será en Cáceres y estarán todos los que tienen que estar. Y tampoco debemos rasgarnos demasiado las vestiduras. No será ni la primera ni la última exigencia de una Comunidad ante el gobierno central que se celebre dentro de sus propias fronteras. Y algunas de ellas han sido muy sonadas, como los astilleros en Cádiz o las del Corredor Cantábrico- Mediterráneo celebradas en Valencia.
Ahora nosotros también tenemos que conseguir que se nos escuche en toda España desde Cáceres. Después de las graves y numerosas incidencias que han sufrido nuestros trenes durante los últimos meses, no podemos permitirnos ser menos en la reivindicación.
