Cientos de personas se congregaron en la plaza Alta convocados por una veintena de colectivos para reclamar a Amigos de Badajoz que no exija el cumplimiento de la sentencia del Tribunal Supremo. Los organizadores subieron a un escenario con una pancarta que decía: "No al derribo. Sí a la Universidad". El presidente del Casco Antiguo, José María Soriano, leyó un manifiesto en el que exigían a Amigos de Badajoz que deje "su soberbia".

El manifiesto exigió responsabilidades a los responsables de las dos instituciones involucradas en el proyecto. Si lo hizo Fernando Sánchez, secretario de CCOO, quien reclamó "responsabilidades políticas, que tienen nombres y apellidos, y eso significa dimisiones en el ayuntamiento y en la Consejería de Cultura".

Soriano recordó el esfuerzo y el dinero que costó el proyecto, así como que "todo lo conseguido se puede perder si prospera lo señalado en la Sentencia. Todos sabemos fehacientemente, que el edificio nunca volverá a su estado originario como dice la sentencia".