La Escuela Oficial de Idiomas de Badajoz no da abasto. Más de un millar de personas que rellenaron el impreso de prescripción con la aspiración de poder recibir clases este invierno, se han quedado fuera, fundamentalmente de inglés y también para el básico de portugués, mientras que en el resto de idiomas que se imparten (francés, alemán e italiano) sí se ha cubierto toda la demanda. La directora del centro, María Isabel Alvarado, reconoce que este año la demanda les ha sobrepasado. Ya les ocurrió el curso pasado, cuando quedaron alumnos fuera para algunos niveles. "Pero este se quedan más", afirma.

Las clases empezaron el 19 de septiembre y todavía a principios de esta semana se estaba llamando a aspirantes que estaban en lista de espera para ocupar las pocas plazas que quedan vacantes porque no todos los admitidos llegan a matricularse. Por eso no pueden saber con exactitud cuántos aspirantes se quedan fuera.

Inglés sigue siendo el idioma más demandado. Había 2.000 preinscritos para todos los niveles. El número más "llamativo" de solicitudes se ha producido para entrar en el primer curso del intermedio. Esto es así porque a los alumnos les basta con haber superado el Bachillerato por inglés para entrar en la escuela oficial de idiomas en esta fase. En este nivel, se presentaron 900 solicitudes para 200 vacantes, con lo cual, 700 preinscritos quedaron fuera inicialmente (número aproximado). Prácticamente en todos los cursos de inglés se han quedado solicitantes fuera, salvo en el último curso, en el avanzado, en el que han entrado todos los preinscritos.

También en el nivel básico ha habido muchas más preinscripciones que plazas. Se presentaron 500 solicitudes y la escuela solo puede admitir a la mitad. Pero en el básico 1 han seguido admitiendo a aspirantes porque muchos preinscritos que rellenaron la solicitud luego se han arrepentido y no se han matriculado, seguramente porque no quisieron presentarse a la prueba de nivel. La directora calcula que se han podido sacar 40 vacantes más que se adjudican por sorteo en función de los puntos baremados (por ser funcionario, familia numerosa, discapacitados y tres grupos según el nivel de ingresos).

En portugués ha habido problemas para el básico 1, pero en los demás niveles han entrado todos los demandantes. Para unas 200 plazas de este primer nivel se presentaron 500 inscritos, pero se ha seguido llamando a solicitantes porque han ido surgiendo plazas vacantes.

POR LA CRISIS

La directora reconoce que la demanda de alumnos se ha incrementado "mucho" en los últimos años. En su opinión, puede deberse a la situación de crisis, porque muchas personas que se quedan en paro deciden aprender idiomas, ya que disponen de más tiempo libre y para mejorar su currículo así como su formación, con inglés como primera opción y también el portugués, por la proximidad geográfica. Es además la posibilidad más barata, porque la matrícula para un nuevo alumno es de 70 euros por todo el año y no existen cuotas mensuales. La directora apunta que el aumento de la demanda es común en todas las escuelas de la región.

En septiembre se da la circunstancia de que hay muchas personas que se acercan a la escuela pensando que están a tiempo de entrar, porque no saben que en mayo hubo un plazo de preinscripciones."Pero para inglés y portugués ya es imposible", subraya la directora. Sí se han admitido para italiano, francés y alemán porque había plazas libres.

Debido a este elevado número de solicitudes, este año ha habido que recurrir al sorteo de una letra del alfabeto, para ordenarlos según el primer apellido, porque muchos aspirantes que se han quedado fuera sumaban los mismos puntos.

En la Escuela Oficial de Idiomas de Badajoz estudian casi 2.500 alumnos y no es posible aumentar la oferta. Hace años se quejaban del mal acondicionamiento del edificio, por su antigüedad y mala acústica para la enseñanza de idiomas. Pero ahora el problema más acuciante es la falta de espacio disponible, que impide abrir más grupos de enseñanza. Tantos hay ya que por las mañanas están casi todas las aulas llenas con grupos de inglés, cuando la mayor actividad del centro es por la tarde.

Una de las novedades de este curso viene motivada precisamente por la falta de espacio del edificio que ocupa la escuela: por primera vez se van a tener que dar clases fuera de estas instalaciones, para atender a los alumnos de la modalidad a distancia que aun siendo así incluye una tutoría presencial. Como el espacio es tan limitado, las clases se imparten en el instituto Zurbarán un día a la semana, por la tarde.