Los pacenses han respondido con energía a la reactivación del servicio público de alquiler de bicicletas (Biba), que estuvo paralizado durante un año por problemas con la concesión. Biba se reanudó el pasado 26 de diciembre con más bases y un nuevo sistema de uso de los vehículos, en el que se ha sustituido el SMS a través del teléfono móvil por la tarjeta de proximidad con un PIN asociado. Desde que este sistema está en funcionamiento se han dado de alta más de 1.200 usuarios y el número de usos se ha incrementado, de manera que en estos pocos días se ha producido más de un 12% de usos en relación a todo el periodo en que el servicio estuvo operativo con anterioridad, entre finales del 2009 y del 2011, según informó ayer el concejal de Infraestructuras, Jesús Coslado.
El concejal se mostró muy satisfecho con los resultados que ponen de manifiesto las estadísticas del uso de este servicio, porque en estos días hasta ayer ha habido 2.600, mientras que en el periodo anterior, durante los dos años en los que estuvo operativo el servicio, se contabilizaron 20.000 usos. "Eso significa que la aceptación por parte de los usuarios del servicio ha sido muy alta y nos obliga a los que gestionamos este proyecto a hacer hincapié en la mejora del servicio de bicicletas y en su ampliación futura", recalcó.
Los usuarios están contentos, a juzgar por el funcionamiento del servicio, pero también se están registrando quejas. El concejal consideró que es "normal" pues el sistema está "arrancando", pero al mismo tiempo aseguró que que todas las sugerencias se analizan y en la medida de lo posible se atienden. Coslado defendió las múltiples ventajas que aporta el nuevo sistema con tarjeta. Respecto a las quejas, mencionó algunas como las que se refieren a la necesidad de que los vehículos dispongan de luces (el alquiler funciona hasta las 22.30 horas, cuando ya es de noche) y aclaró que cuando se adquirieron las primeras bicicletas contaban con luces pero las que no disponen de ellas es porque han sido robadas. El ayuntamiento quiere adquirir ahora un sistema de iluminación antivandálico para dar respuesta a estas quejas.
Los usuarios también lamentan que en ocasiones faltan vehículos en las bases. Eso se solucionará sacando más bicis a la calle. El responsable municipal anunció que a lo largo de la próxima semana se van a poner en uso entre 50 y 60 bicicletas más para subsanar esta deficiencia. Cuando se reactivó el servicio, no existía para todos los vehículos disponibles una pieza de anclaje (paletón) de las bicis a la base, porque estaban adaptadas al sistema antiguo. Por eso, en estos momentos se está procediendo a adquirir estos paletones para poder sacar más bicicletas a la calle. Ahora solo hay 60 vehículos disponibles y la idea es llegar a 120 y tener otro tanto para el movimiento de unas bases a otras en las franjas horarias en las que se incrementa su uso, que suelen ser por la mañana coincidiendo con la entrada en el trabajo, al mediodía para volver y los fines de semana, entre las 11.00 y las 12.00 de la mañana.
Respecto a la ampliación del carril-bici en la ciudad, Coslado puntualizó que existe un proyecto reflejado en el plan de movilidad que incluye aproximadamente 75 kilómetros. En la actualidad existen solo 25 "y estamos trabajando en ello", lo que conlleva decidir qué trayectos son los más prioritarios. Por eso este año se va a destinar una partida presupuestaria a este fin y se adquirirá material para habilitar aceras bici (con pintura de poliuretano que es antiderrapante) pues hay zonas en las que es inviable una plataforma independiente.
