Más de 200 hosteleros y comerciantes de Badajoz se han manifestado esta mañana para pedir al Gobierno central una menor presión fiscal y a los representantes políticos locales, provinciales y regionales que intercedan por su situación. Ya el viernes pasado los comerciantes convocaron una protesta y hoy se han sumado los hosteleros. La concentración se ha iniciado a las 11.30 horas en la calle Menacho, en el extremo con la avenida Ramón y Cajal, y los congregados han recorrido después esta calle y se han dirigido a la plaza de España, frente a la fachada del ayuntamiento. Ha durado alrededor de una hora.

El presidente de la Asociación de Hosteleros de Badajoz, José María Pérez Marqués, ha defendido que "esto es una guerra que nos atañe a todos, es una condena y una pandemia que estamos sufriendo todos". Los autónomos, los hosteleros y el pequeño comercio reivindican “trabajar, que nuestros puestos de trabajo se defiendan y que nuestros trabajadores estén protegidos y amparados” y que si por motivos sanitarios -“que nosotros comprendemos”, según ha dicho- tienen que reducir “en un acto de responsabilidad” sus aforos y su capacidad de trabajo, reclaman “que en la misma medida se acople la presión fiscal”. Es decir: "Si nosotros trabajamos al 40%, que la cotización de la Seguridad Social y los impuestos sean al 40%". Saben que son medidas que debe adoptar el Gobierno central, por eso “nosotros pedimos a nuestros políticos, a nuestros representantes, que abanderen nuestra demanda”. Porque estos sectores “representamos un PIB para esta región bastante importante”.

Los hosteleros asumen que el cierre se va a prolongar una semana más, en función de la evolución de los contagios, pues aún no han salido los de Nochevieja y los del día de Reyes. “Por desgracia esto pinta que va a ir para largo”, ha comentado Laura García. Pero “si nos cierran, que nos ayuden”, pues “es la única manera de que podamos sobrevivir”. García ha reivindicado que “en el momento en que muera el pequeño comercio, muere la hostelería, y si muere la hostelería, muere el comercio, vamos de la mano, más en una ciudad de servicios”.

Sin embargo, los pequeños comerciantes confían en poder reabrir el próximo jueves, 14 de enero, tras haber estado cerrados una semana. Félix Retamar, del Centro Comercial Abierto de Menacho, señala que si la Junta de Extremadura “tiene que tomar otras opciones sobre las grandes superficies, que las tome”, pero espera que el Gobierno regional “recapacite” respecto a su sector, porque el pequeño comercio “no tiene nada que ver, ha tomado todas las medidas y la asistencia ahora es mínima, porque en ningún momento hemos llegado al 30% de los aforos”.

En apoyo a estos sectores, que representan a 10.000 familias de la ciudad, ha acudido a la manifestación el equipo de gobierno municipal. El alcalde, Francisco Javier Fragoso, ha lamentado que para muchos negocios este cierre “sea la puntilla final” y ha reclamado “al resto de administraciones” que tomen medidas “que tengan impacto inmediato” porque la situación del pequeño comercio y de la hostelería es de “asfixia total”. Fragoso ha defendido que hay que conseguir un mecanismo automático de “a ingresos cero, impuestos cero”, pues “si tú los obligas a cerrar no les puedes estar cobrando e incluso subiendo el sello de autónomos, es una barbaridad”. Sobre la posibilidad de que el cierre se prorrogue más tiempo, el ayuntamiento no entra a valorarlo. “Nosotros no podemos analizar las medidas sanitarias porque no tenemos datos, quien tiene los datos debe tomarlas, pero no se puede dar la sensación de improvisación, tienen que estar planificadas para evitar que los escenarios empeoren”, ha remarcado.