Unos 3 millones de metros cuadrados, 300 hectáreas de superficie de cultivo de cereales y pastos, en su mayor parte, han sido pastos de las llamas en lo que llevamos de junio, en un total de 105 incendios, lo que supone diez veces más superficie afectada que en el mes de mayo, cuando se contabilizaron 308.000 metros cuadrados, algo más de 30 hectáreas, en 65 intervenciones de los bomberos por esta causa.

Son algunos de los datos que facilitó ayer el concejal delegado de Bomberos, Francisco Javier Gutiérrez, sobre las actuaciones del servicio municipal contra incendios. Gutiérrez destaca el salto que se observa en las cifras respecto del mes de abril, cuando se contabilizaron 50 metros cuadrados de pastos afectados por el fuego, en solares sobre todo, pues en mayo ya fueron los 308.000, para multiplicarse por diez en lo que va de junio.

La causa de estas cifras, además de que en verano bajan los siniestros en hogares y suben en el campo, está en que las intensas lluvias del invierno y la primavera han propiciado una abundante vegetación, que con las altas temperaturas constituye un mayor volumen de combustible en caso de declararse un fuego, a veces por causas naturales, o por accidentes, y otras provocados.

En este mes, los bomberos han sofocado algunos incendios de 20, 40 y hasta 60 hectáreas de cereal, pastos y matorrales, que han tenido que contar con ayuda del Infoex, en ocasiones con helicóptero, y también del SPEI de la diputación. El último fue el que afectó a unas 60 hectáreas en la carretera de Olivenza, el pasado día 9.

El parque de bomberos tiene en la actualidad 16 miembros de servicio, por el refuerzo de la feria; cuando ésta concluya, volverá a contar con 11 o 12, si bien con el personal en alerta por si hubiera que requerir su presencia; y con el parque móvil al completo.

Gutiérrez señaló que lo que queda de verano, dada la superficie ya quemada, es posible que se reduzca el número de incendios de pastos "porque esa parte no volverá a arder", dijo. Y recomendó a los ciudadanos y a los conductores, prudencia cuando salgan al campo o viajen por carretera. "Que tengan sentido común, que no hagan fuegos ni barbacoas, porque están prohibidos, y tengan cuidados con colillas o chispas de vehículos y maquinaria".