En torno a 40 agentes, entre Policía Nacional y Policía Local de Badajoz serán responsables de la seguridad en las calles de la ciudad los momentos de mayor aglomeración del Carnaval, según acordó ayer la Junta de Seguridad Ciudadana, que se reunió en el ayuntamiento para organizar el dispositivo policial de las próximas fiestas.
Aunque el dispositivo es distinto cada turno, el promedio es que haya en la calle unos 25 policías nacionales y entre 15 y 19 policías locales por las noches, todo el domingo y la mañana del martes. Según el concejal de Seguridad Ciudadana, Alejandro Ramírez del Molino, esta cantidad de efectivos es "suficiente" a pesar de la cantidad de gente que se aglomera estos días en determinados lugares de la ciudad y que está en la calle bebiendo alcohol. La prueba es que "ningún año ocurre nada". La presencia policial es semejante a la de años anteriores.
COLABORACION La Policía Nacional y la Local se coordinarán de tal manera que entre Santa Marina y el casco antiguo serán los agentes del Cuerpo Nacional de Policía los encargados de la vigilancia y de Santa Marina hacia afuera, los agentes municipales. En casos puntuales, actuarán de forma conjunta si se producen conflictos. Por su parte, la Guardia Civil realizará controles de alcoholemia en las salidas de la ciudad, para evitar que la gente que esas noches beba salga del casco urbano.
Este año, además, la vigilancia policial prestará especial atención a la venta ambulantes de alimentación, que según anunció Ramírez del Molino, no se permitirá en ninguna de las calles donde se producen aglomeraciones de gente, y tanto la Policía Nacional com la Local tienen instrucciones para no permitir que haya carros de venta, como medida de control sanitario. Sí se permitirán las barras de los bares en las calles, que son especialmente típicas en la barriada de San Roque el martes de Carnaval, coincidiendo con el Entierro de la Sardina.
Por otro lado, el teniente de alcalde solicitó la colaboración ciudadana para que no haya vehículos aparcados en las calles donde se celebran los desfiles, fundamentalmente el gran desfile del domingo, para que el ayuntamiento no se vea obligado a retirar los coches con las grúas municipales, lo que provoca mucho retraso en los preparativos. A partir de mañana miércoles se colocarán octavillas a lo largo del itinerario en los parabrisas de los automóviles. Como se recordará, este año los grupos empezarán a concentrarse desde el puente de la Autonomía, en la glorieta de los Tres Poetas e iniciarán su recorrido en Puerta Palmas, seguirán por el paseo Fluvial, Santa Marina, Enrique Segura Otaño y terminarán en la plaza de la Constitución.
Como medida temporal, se producirán algunos cortes según la intensidad de vehículos, que afectarán a la avenida Villanueva, Santa Marina, accesos de la plaza de los Alféreces, Saavedra Palmeiro y Fernando Calzadilla, así como la plaza de España.
URINARIOS La concejala de Festejos, Consuelo Rodríguez Píriz, también compareció ayer para informar del inicio del Carnaval, que ya ha comenzado con el concurso de murgas en el teatro López de Ayala. La concejala elogió la participación de los grupos de fuera, que según Rodríguez Píriz, son responsables de que el concurso gane cada año. En cuanto a la organización de los próximos días, la concejala recordó que se instalarán tres módulos de aseos públicos en la plaza de España, San Atón y Santa María de la Cabeza, donde habrá personal para atenderlos y subrayó que son gratuitos.
