Más de 400 personas procedentes de distintos puntos de la diócesis celebraron la madrugada del domingo una vigilia nocturna en la catedral de Badajoz, presidida por el arzobispo de Mérida-Badajoz, Santiago García Aracil, con motivo del I Centenario de la Adoración Nocturna de Badajoz, una asociación de laicos de la Iglesia que está presente en 13 localidades de la diócesis y que tiene como carácter principal la adoración a Jesús Sacramentado.

Los actos comenzaron el pasado 27 de abril con una conferencia a cargo de Mariano Cabanillas y concluyeron la madrugada del domingo tras los turnos de vela y la procesión eucarística por las calles de Badajoz, desde la catedral hasta el paseo de San Francisco, y la bendición de los campos.

El sábado, a las nueve de la noche, los adoradores descubrieron una placa conmemorativa del centenario de la vigilia inaugural de la Adoración Nocturna de Badajoz en la plaza de San Atón, lugar donde estuvo el seminario, que acogió la primera vigilia, según explicó el presidente diocesano de esta asociación, Rafael Carracedo.

A continuación, sobre las diez de la noche, celebraron la procesión de banderas hasta la catedral, donde a partir de las 22.30 horas se inició la vigilia.

ORIGENES La asociación de la Adoración Nocturna nació el 6 de diciembre de 1848 de la mano del judío converso Hermann Cohen, en París, y llegó a España en 1877 y en Badajoz, aunque desde 1903 se venían reuniendo algunas personas entorno a Cristo Sacramentado en la iglesia de San Agustín, es en 1907 cuando se inaugura en la capilla del Seminario Conciliar de San Atón, en presencia del obispo Félix Soto Mancera, autoridades civiles y representantes de la Adoración Nocturna Española.

Los adoradores nocturnos, según publica Iglesia en Camino, aprovechan la noche para orar, igual que hizo Jesús en el monte de los Olivos, por lo que una vez al mes se unen durante algunas horas de la noche en una vigilia que se divide en varias partes.