Más de 600 personas pasan al día por el centro comercial La Plaza, que la empresa Mercasa construyó en la barriada de Pardaleras y es el único de estas características que hay en Badajoz, según informó la gerencia del mismo a EL PERIODICO. Del total, unas 450 acuden al supermercado Aldi y 150 a la galería de establecimientos de alimentos frescos. El objetivo es, sin embargo, "aumentar estos números a través de campañas y juegos entre los distintos establecimientos", señaló la gerencia.

La Plaza tiene el 80% de los locoles ocupados desde que abrió sus puertas, en noviembre del año pasado. La gerencia calificó este dato como "positivo", ya que el porcentaje habitual en este tipo de centros es del 50%, transcurrido un año desde la apertura. Aunque las instalaciones aspiran a alcanzar el 100% de ocupación. Con esta intención, están realizando un estudio entre sus clientes para saber cuáles son las necesidades del entorno e identificar las mejoras que deben introducir.

El centro comercial La Plaza se divide en tres áreas. Una está dedicada a la zona comercial, donde hay tiendas de deportes, prensa, telefonía, herbolario, perfumería, ferretería, panadería, frutos secos, una entidad bancaria y un restaurante. Además en este área hay una plaza de abastos con 14 establecimientos de alimentos frescos. En la segunda se localiza un supermercado perteneciente a la cadena Aldi, y la tercera pertenece al ayuntamiento, pero en la actualidad está vacía.

GUARDERIA Además, el centro presta otros servicios. Los clientes pueden dejar a los niños mientras realizan su compra en la guardería ubicada en la zona donde se localiza la galería comercial, dejando un euro de fianza, que se dedica a la adquisición de golosinas para los niños. Además, hay un servicio de reparto a domicilio.

El horario de apertura es de 6.30 de la mañana a nueve de la noche, y a él no sólo van vecinos de Pardaleras a comprar, sino que también lo hacen ciudadanos de otros barrios, como los de San Roque o Cerro de Reyes.

La Plaza fue inaugurado el pasado mes de noviembre por el alcalde de Badajoz, Miguel Angel Celdrán, y se trata de una cesión del ayuntamiento a la empresa Mercasa por 25 años. Trascurrido este tiempo las instalaciones, de 2.652 metros, pasarán a propiedad municipal.