Combustible para las naves espaciales en la serie Futurama o un componente mágico para crear pociones en la película Final Fantasy . En la ciencia ficción la materia oscura tiene propiedades extraordinarias pero en la vida real es uno de los mayores retos científicos al que investigadores de todo el mundo intentan dar respuesta 70 años después de su descubrimiento. Ese es el fin con el que se reúnen desde ayer y hasta hoy más de 40 expertos en el Centro Extremeño de Tecnología Avanzadas Ceta-Ciemat Trujillo, donde ponen en común el primer año del trabajo que desarrollan conjuntamente y en el que seguirán trabajando hasta el 2014 más de un centenar de científicos.

El proyecto Consolider-Ingenio, denominado MultiDark --Multimessenger Approch for Dark Matter Detection-- y financiado por el Ministerio de Innovación y Ciencia, se centra en descubrir cómo es la materia oscura que forma el 80% del universo y que no se ve a simple vista porque no produce luz, de ahí su nombre. Hace décadas que dejó de ser una hipótesis pero aún no se sabe cómo es y cómo actúa, ese es el enigma. "Estamos ante una materia desconocida, no son los átomos de los que estamos hecho nosotros; además interacciona con otras partículas muy débilmente, y cuando lo hace no emite fotones, de ahí que sea muy difícil de detectar", explica Carlos Muñoz, catedrático de física teórica de la Universidad Autónoma de Madrid y coordinador de Multidark, que gestiona esta universidad.

El equipo trabaja en tres líneas: analiza partículas candidatas, estudia la posible distribución de éstas en la galaxia y con estos resultados realiza experimentos para tratar de detectar esta materia en laboratorios subterráneos o telescopios atmosféricos. Para ello, cuentan con la aportación del Ceta-Ciemat, parte del proyecto. "Su contribución es muy interesante porque es necesario hace simulaciones enormes de cómo está distribuida la materia que precisan del supercomputador", señala Muñoz.

Descubrir este enigma "sería importantísimo para resolver un eslabón más en la evolución del universo y su conocimiento; además supondría una revolución hallar partículas e interacciones desconocidas hasta el momento".