Muchas de las personas que acuden estos días a la Feria de los Mayores aprovechan su estancia para someterse a una puesta a punto y dedican parte del tiempo al cuidado de su salud y su belleza.

Desde por la mañana pueden estirar huesos y articulaciones en el taller de gimnasia, donde pueden hacer ejercicio como Cecilia Durán y Emilia Fernández. Esta última, con 88 años, lo practica desde que cumplió los 65 y dice sentirse "ligera como una pluma", por eso lo recomienda a todos los mayores, "porque si no se enquilosan y esto es estupendo para la salud y la mente". También Cecilia Durán destaca los beneficios de la gimnasia geriátrica, "estuve dos años con depresión y esto me ha venido fenomenal, me siento más joven", señaló.

Si sienten algún dolor o malestar pueden consultar a los fisioterapeutas que tienen al lado, en el expositor del Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Extremadura, donde Noel Urosa y sus compañeros pueden ofrecerles información e incluso darles algún masaje. Aquí reina la artrosis, según este fisioterapeuta, que también ve lumbalgias y problemas en los pies.

En la camilla de los fisioterapeutas estaba Sixto Cáceres, de Muedas de Granadilla, que buscaba alivio en un pie afectado por una caída con una moto hace dos años. "Aprovecho que estoy aquí para ver si noto mejoría y seguir tirando".

Aquellos que tienen algún problema en los pies se dirigen al expositor del Colegio de Podólogos de Extremadura, donde pueden hacer una revisión y un diagnóstico, según Fabián Dios, quien afirma que "afortunadamente, los podólogos ya no somos unos desconocidos para los ancianos".

Si hay tiempo también pueden pasarse por Pivot Point, aunque aquí siempre hay colas, ya que el corte y el peinado son gratuitos. "Sólo el primer día peinamos a 166 mayores", según Ana Cidoncha, responsable de esta escuela de peluquería, que tiene trabajando en la feria a 16 personas en el turno de mañana y otras tantas en el de tarde.

EXIGENTES Y COQUETOS "Los mayores son muy exigentes y coquetos, están acostumbrados a peinados muy elaborados y les gusta que estén muy terminados", explica Ana mientras peina a Julia Gil, una mujer de 77 años de Villanueva de la Serena, que nada más bajar del autobús se fue directa a la peluquería.

"He venido a que me hagan el corte de pelo que el año pasado le hicieron a mi vecina, era maravilloso. Luego voy a lucir el peinado en el baile y en cuanto me vaya se lo enseño a todas las del pueblo", decía Julia.

Después de relajarse con el ejercicio, algunos van a revisarse la vista y el oido, pero antes reponen fuerzas en algunas de las degustaciones que hay en la feria o acuden a comprar en los puestos de chacina, quesos y dulces. Luego continúan, no sin antes hacer una parada en la pista de baile.