Angel Jiménez Roldán trabaja desde hace cinco años en la oficina de Negociado de Objetos Perdidos, situada junto a la jefatura de la policía local de la calle Montesinos, y afirma que durante este tiempo le han entregado de todo, "incluso un día me llegaron a dejar una dentadura postiza", cuenta entre risas. No suele ser habitual que las personas depositen objetos tan singulares, pues es más corriente que entreguen llaves, carteras y gafas, "lo que más llega desde que trabajo aquí", afirma Jiménez, quien asegura que en lo que va de año han depositado alrededor de 500 objetos extraviados.

El responsable de estos objetos explica que en el verano no tiene mucho trabajo, "sí durante las navidades, que es cuando incluso me han traído regalos de Reyes ya empaquetados".

Una maleta

Los turistas, según recuerda, son los que más suelen ir a reclamar alguna pertenencia. "Una maleta de una alemana tengo por ahí guardada, la llamamos para enviársela pero no da señales de vida", señala.

La mayoría de los enseres los hacen llegar a la oficina organismos como Renfe, Correos o la Policía Nacional, aunque explica que muchos particulares se acercan personalmente a dejar cosas que han encontrado. "Una señora entregó un sobre que contenía 6.000 euros y, más tarde, el dueño la recompensó con 600 euros".

Según su experiencia, son raros los casos en los que alguien intenta engañarle, "porque lo que más abunda es la buena voluntad de los ciudadanos de Badajoz".