Un grupo de trabajadores del servicio de Parques y Jardines, dependiente de la Concejalía de Medio Ambiente, lleva desde hace veinte días trabajando en la limpieza de las laderas de la Alcazaba, donde están cortando por la base cientos de ailantos, árboles de origen chino que se ha convertido en una especie silvestre invasora por su rápido crecimiento y su capacidad para prosperar en cualquier lugar.

El concejal del área, Antonio Avila, confirmó ayer la proliferación de esta especie en zonas verdes de la ciudad y que en Circunvalación se está intentando eliminar por el daño que puede ocasionar a la muralla. No se están levantando de raíz, por el trabajo que eso conllevaría, sino que se están cortando por la base y usando un producto herbicida para intentar que no vuelvan a crecer y erradicarlos definitivamente. Los ejemplares que en esta zona han crecido tienen distintas altura, desde pocos centímetros hasta incluso 4 metros y 10 centímetros de diámetro del tronco. Según los datos aportados por Avila, ya se han cargado entre cuatro y cinco camiones.

También se va a actuar detrás del edificio de la Escuela Oficial de Idiomas, donde ya los cortaron hace dos años y han vuelto a crecer, y en el parque de la Legión.