En los institutos, en la universidad, en colectivos y asociaciones juveniles y hasta en la calle. Esos fueron los lugares elegidos por el Movimiento Factory para llevar a cabo el millar de encuentas con las que recoger las opiniones de los jóvenes sobre los contenidos que debería tener la Factoria Joven de Badajoz, cuál debería ser su ubicación --el punto más polémico--, sus recurso y sus horarios.

La puesta en común de los resultados llevó a la conclusión de que el skate, el BMX, la escalada y las actividades relacionadas con la danza y la música se repartían el mayor porcentaje entre las preferencias de los jóvenes pacenses. Ese estudio se convirtió en un proyecto en el que participaron especialistas en cada materia aportando su conocimiento para asesorar sobre cómo debería ser cada tipo de instalación. En este sentido, Antonio Gamero, coordinador del Movimiento Factory en Badajoz, puso varios ejemplos: para el rocódromo se contó con los consejos de Alcor Extremadura, para el BMX con el campeón mundial de esta disciplina, el pacense Rafael Alvarez de Lara. También se tuvo el asesoramiento de otros colectivos dedicados al circo, al teatro y la animación, el arte urbano... A la vuelta de vacaciones esperan ver cuál ha sido el resultado final que han plasmado los arquitectos.

Gamero destacó que estas instalaciones son muy necesarias para cubrir la demanda de los jóvenes en determinadas actividades que van ganando aficionados día a día dentro de la denominada cultura urbana, porque ahora la poca oferta que existe es privada.

El Movimiento Factory surgió tras el anuncio de la puesta en marcha de las factorías en la región de la unión de distintas asociaciones juveniles. "Estábamos a la expectativa, porque estábamos un poco ´hartos´ de que se habilitasen edificios, que en realidad estaban desaprovechados y en desuso, por no tener lo que de verdad los jóvenes solicitan. Por eso, Movimiento Factory surgió como un canalizador entre los jóvenes y el Instituto de la Juventud", apostilló Gamero.