La ministra de la Vivienda, María Antonia Trujillo, volvió ayer a ejercer el magisterio jurídico en Badajoz, donde pronunció la conferencia de clausura de la XVIII promoción de la Escuela de Práctica Jurídica, en la sede del Colegio Oficial de Abogados.

Trujillo dijo que "es un honor estar con el profesorado de la Escuela de Práctica Jurídica, con el que estoy relacionada porque soy colega y he impartido docencia en algunos cursos". Calificó de "muy útil" la formación que han recibido los 28 abogados de la promoción, "no solo para el sector público o el privado, sino para su actividad como profesional liberal, y más teniendo en cuenta los cambios de normativa que se producen en un mundo globalizado".

Le hubiera apetecido hablar "del derecho a la edificación, pues hemos publicado un manual que recoge toda la normativa y es muy útil para la abogacía", pero solo hizo alguna mención muy breve sobre la Ley del Suelo. También afirmó que los abogados "son una magnífica cantera de excelencia y cualificación para la vida pública y para el ejercicio privado".

Llegó acompañada por la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, y fue recibida por el alcalde de la ciudad, Miguel Celdrán; la consejera de Presidencia, Casilda Gutiérrez; el presidente de la diputación, Juan María Vázquez, y los presidentes de los colegio de procuradores, Hilario Bueno, y de abogados, José Manuel Rubio, además de la directora de la Escuela, Filomena Peláez.