El concejal de Hacienda, Nicasio Monterde, tiene previsto mantener mañana una reunión con el alcalde y los técnicos de la Oficina del Catastro municipal, para intentar buscar una solución al problema que se plantea con los propietarios y promotores de numerosos inmuebles de la ciudad que, aunque llevan años construidos, siguen sin pagar al Ayuntamiento de Badajoz el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) porque no se han dado de alta en el Catastro, dependiente de la Agencia Tributaria, organismo que, según Monterde, no establece los medios suficientes.

Desde hace casi dos años el ayuntamiento tiene contratada a una empresa privada que se está encargando de actualizar el padrón municipal del IBI para poner al día el listado de viviendas que no se han dado de alta, a pesar de llevar años edificadas. Estos trabajos han permitido incrementar las previsiones iniciales del IBI más del 14%. Pero el concejal no se muestra satisfecho, porque según explica, no depende sólo de la labor de esta empresa, sino de la Gerencia del Catastro, que tiene que dar de alta todas estas edificaciones.

La empresa detecta lo que no está dado de alta y el ayuntamiento, desde la Oficina Catastral municipal envía a todos los propietarios escritos indicándoles que se pasen por el Catastro de la Agencia Tributaria con la documentación requerida.

CASO OMISO El problema, según Monterde, es que un porcentaje muy elevado de ciudadanos y empresas constructoras y promotoras "hacen caso omiso a este requerimiento". Llegado a este punto debe intervenir la Gerencia del Catastro, pero como el concejal señala que tiene que atender a toda la provincia, considera que no tiene medios suficientes para la ciudad de Badajoz. Esta situación lleva a que haya urbanizaciones enteras que lleven varios años sin estar dadas de alta. "Algunas son para llevarse las manos a la cabeza", apunta sin dar nombres. El titular de Hacienda señala que "esto no se puede consentir", porque el ayuntamiento está dejando de percibir cada año "unos pocos de cientos de millones".

El problema es que a los morosos no les ocurre nada y a medida que pasa el tiempo, los años van prescribiendo. Monterde lleva ya tiempo denunciando esta situación y por eso reclama que a quienes hacen caso omiso del requerimiento, se les sancione o se establezcan mecanismos oportunos para que desde el Ayuntamiento no se les conceda ninguna licencia, de habitabilidad o de primera ocupación, si la promotora no ha dado de alta previamente en el Catastro.