La ciudad recobra poco a poco el pulso de la vida cultural conforme se avanza en el proceso de desescalada en el tramo final del estado de alarma por la pandemia del coronavirus. Parece llegado el momento de dar un paso más en el plano de la realidad. Si el pasado viernes reabrieron los Museos Arqueológicos y Muba, ayer se volvió a tener contacto físico con la historia y el arte de los algunos de los principales monumentos de Badajoz.
No hubo aglomeraciones, pero no dejó a haber visitantes en todos los espacios que volvieron a abrir para disfrute de locales y foráneos, si bien otros que son elementos o forman partes de conjuntos más amplios, o se encuentran integrados en el urbanismo de la ciudad, sí se han podido disfrutar.
Fue el primer día que el estado de alarma se pudo volver a las visitas reales, pisando piedra, aunque con el aforo limitado a un tercio y cumpliendo los protocolos de seguridad, como explicó el concejal de Turismo, Jaime Mejías.
Abrieron el Fuerte de San Cristóbal, que redujo el aforo de 50 a 16 personas; Puerta de Palmas, de 6 a 2, como de Espantaperros y Galería de Fusileros; la torres de Los Acevedos, de 15 a 5, y de Santa María, de 10 a 3.
Señaló Mejías que «poco a poco volvemos a una cierta normalidad, cumpliendo todos los protocolos». Y añadió que a las 11.00 horas «habían entrado 12 personas a la Galería de Fusileros; en el Fuerte de San Cristóbal, a las 10.15 horas, nadie porque acababa de abrir, y en Puerta de Palmas, a la 12.00 ya habían entrado 27 personas».
Además, recordó el edil que los monumentos abrirán los sábados y domingos de 10.00 a 14.00 horas, con presencia de vigilantes, que se encargarán del cumplimiento de la medidas de separación personal, del uso de mascarillas y de higiene con hidrogel en cada espacio, obligatorios.
Limpieza de la alcazaba
Limpieza de la alcazabaJaime Mejías valoró «la labor de nuestra empresa de prevención de riesgos, que ha instalado carteles indicando todas las medidas y protocolos sanitarios, y en cada monumento hay un poyete con gel hidroalcohólico a la entrada».
También destacó «la gran currada de Medio Ambiente con el concejal Jesús Coslado a la cabeza para dejarlos limpios; no te quiero contar cómo estaba el interior de la alcazaba, la Galería de Fusileros y el Fuerte de San Cristóbal, que parecía la selva amazónica, y los han dejado limpios de pastos, menos el yacimiento arqueológico, que requiere el permiso de Patrimonio». Y señaló que para el desbroce de las laderas de la alcazaba «tenemos un contrato lanzado en licitación que saldrá en el perfil del contratante esta semana para desbrozarla y que este verano no se produzcan más incendios»..
