El excéntrico artista Morrissey, conocido por liderar la mítica banda The Smiths en los 80, revolucionó ayer la prensa británica con la publicación de su reveladora autobiografía. Enmarcada dentro de la aclamada colección de clásicos de la editorial británica Penguin desde su primera edición, Autobiography , que así se llama la obra, desvela jugosos detalles sobre la vida personal del cantante como su "falta de interés" hacia las mujeres en la adolescencia y cómo tuvo su primera "relación seria" con un fotógrafo a los 30 años.

"Por primera vez en mi vida el eterno yo se convirtió en un nosotros al conectar finalmente con alguien", escribe Steven Patrick Morrissey al hablar de los comienzos de su relación con el fotógrafo Jake Owen Walters, al que conoció pasada la treintena en una cena en Notting Hill. "Jake y yo colisionamos el uno con el otro de manera muy intensa. Devorábamos cada minuto del día", relata el autor sobre su romance con Owen, con el que asegura que se mantuvo dos años "en un jocoso guiso de genialidad y estupidez". El intérprete de The Queen Is Dad asegura que notó su "falta de interés" por las mujeres durante la adolescencia. "Las chicas continuaban sintiéndose misteriosamente atraídas hacia mí y yo no tenía ni idea por qué", cuenta el letrista, al que le parecían "mucho más emocionantes" las bicicletas de carrera que su padre, Peter Morrissey, llevaba a su casa en Manchester. Aún así, el legendario músico descubre en el libro que alguna vez ha pensado en "producir un pequeño monstruo" junto a Tina Dehghani, una amiga íntima que conoció cuando se mudó a Los Angeles.

El legendario músico, que se autodefine como enemigo de la monarquía británica, persona poco sociable, vegetariano y "raro" en sus memorias, describe en ellas un conmovedor episodio de acoso escolar por parte de un profesor en sus primeros años de colegio. Según sus palabras, el docente mostró un interés especial en él, llegando a observarle mientras se secaba tras las duchas reglamentarias que seguían a las clases de educación física y haciéndole "masajes lentos y sensuales" para curarle una muñeca rota.