Son mujeres, madres, señoras de su casa, solidarias y están preocupadas por las mujeres de otros países y por el futuro de las niñas de su entorno. La asociación Tamarán, localizada en Badajoz, se define como un colectivo abierto, muchas de sus socias son del Opus Dei, pero no todas y ayer inauguraron el segundo rastrillo benéfico en las instalaciones del Casino, en Ramón Albarrán, donde estará hasta el domingo.

Los fines de esta asociación son promover obras benéficas, sociales y culturales en favor de la mujer. El año pasado ya organizaron el primer rastrillo destinado a la India con el que obtuvieron casi 9.000 euros.

Esta vez el objetivo es conseguir fondos dirigidos a la capacitación de mujeres en una Escuela de Hostelería de la localidad peruana de Cañete, un proyecto que lleva el Opus Dei, según explicó Teresa Martín, miembro del patronato. En la exposición se pueden adquirir más de 300 artículos, en su mayor parte labores artesanales que las propias mujeres realizan.

Esta asociación ha puesto en marcha además en la calle La Bomba un ´club para niñas´, donde las pequeñas pasan el tiempo libre, se les ayuda a estudiar y reciben formación como apoyo a la enseñanza familiar. Teresa Martín insistió en que no se trata de una asociación cerrada "pero no la hemos promocionado suficientemente".