Francisco Muñoz, secretario local del PSOE en Badajoz y portavoz de su grupo municipal, anunció ayer que no se presentará a la reelección en el próximo congreso local el 7 de octubre y en el que se elegirá una nueva ejecutiva y un nuevo secretario general, de la agrupación más numerosa de la región, con 600 afiliados, con un crecimiento del 20%.

Muñoz explicó que se trata de una postura "suficientemente meditada y completamente mía", del mismo modo que cuando asumió la candidatura a la alcaldía pacense tras obtener "el apoyo del 97%" de los afiliados en el congreso de 2004.

Los momentos "menos gratos" de esta etapa que termina han sido por no conseguir los resultados para volver a gobernar en Badajoz", de ahí que entienda que el PSOE necesita "nuevas perspectivas y un afán renovador para lograr de nuevo la alcaldía".

Francisco Muñoz dijo que el PSOE ha cubierto una etapa en la que "ya es momento de construir un nuevo proyecto", si bien su intención es "acabar la legislatura como portavoz" en el ayuntamiento de la ciudad. Sobre el futuro candidato, dijo que no hay aún ninguno sobre la mesa, y su deseo es que integre y represente a "todos los militantes".

Finalmente, respondió a las declaraciones del alcalde Miguel Celdrán, en las que dijo que no participaría más en el Consejo de Grandes Ciudades, si tras la reunión de ayer "no se concretan plazos para los proyectos de Badajoz". Para Muñoz esas declaraciones están "fuera de lugar" y "echan balones fuera", pues "se debe respetar la colaboración institucional que supone el Consejo y que beneficia a Badajoz".

El portavoz socialista añadió que la postura de Celdrán es "partidista y busca el enfrentamiento con fines electorales", ya que "exige cumplir plazos cuando desde el consistorio no se cumplen las competencias en materia de tráfico y limpieza".