Los grupos del XXIX Festival Folclórico Internacional de Extremadura realizaron ayer el tradicional Ven a bailar con los grupos del festival , una actividad que se ha desarrollado durante los 29 años de existencia del festival y que contó con la presencia de unos 200 espectadores en San Francisco. Los grupos, subidos en el templete de la plaza, ejecutaban bailes sencillos y más tarde invitaban al público presente a danzar junto a ellos.

La timidez fue una constante entre los asistentes, tan solo algunas personas se lanzaban a bailar con los grupos. Chonchi Verdasco se animó con el primer grupo, los angoleños. "Soy de Barcelona y es la primera vez que vengo al festival, a mi hija y a mí nos encanta bailar", dijo esta catalana a quien le asombró una cosa: "no pensaba que los pacenses fuesen tímidos", aseguró.

Tras romper el hielo los angoleños, los espectadores comenzaron a involucrarse más y así los italianos consiguieron montar un corro de unas 30 personas, entre público y artistas, que bailaron una tarantela. "No sé bailar, pero el ritmo de la música y la simpatía de las bailarinas te invitan a participar y pasarlo bien", dijo Jorge Valhondo, quien asiste al Ven a bailar desde que comenzó el festival, del cual mantiene recuerdos imborrables.

Jorge Acosta, integrante de la agrupación paraguaya, destacó el calor del público pacense en todas la actuaciones que hasta ese momento han tenido lugar. "Es la primera vez que estoy en Badajoz y los espectadores responde con fervor ante nuestras espectáculos", afirmó. Por su parte, José Salguero participa en este evento desde hace muchos años, pues pertenece a la agrupación de Coros y Danzas de Badajoz desde que era un niño. "Nosotros hacemos que la tradición del baile regional se herede de padres a hijos, para que no desaparezca", afirmó.

La coordinadora de esta actividad, Rosa María Reguera, explicó que ésta es una de las actividades clásicas del festival y mostró su deseo porque el Ven a bailar con los grupos del festival se mantenga "al menos otros 29 años más", aseguró.