La estación depuradora de aguas residuales compacta que Aqualia está construyendo para recoger las aguas fecales del Corazón de Jesús funcionará antes de este verano. Según informó ayer el jefe del servicio de Inspección de AguaS del Ayuntamiento de Badajoz, Juan José Gómez, las instalaciones estarán a pleno rendimiento antes de un mes, y se acabará de este modo con el problema de saneamiento que soportan los vecinos de esta barriada, donde existe un pozo séptico que recoge sus aguas sucias que tiene que ser vaciado cada pocos días, así como el olor que desprende, sobre todo cuando suben las temperaturas. "Esto era una cuestión de salud pública", defiende Gómez.

La depuradora se está habilitando en una parcela de mil metros cuadrados situada en la margen izquierda de la carretera de Olivenza, a la entrada de una finca privada, a 1.500 metros del Corazón de Jesús. Según el jefe de servicio, se ha optado por la última tecnología en compacto y es una planta única en Badajoz, adecuada a la población que tiene que atender, con poco mantenimiento, costes de explotación mínimos y que no desprende olores. Plantas de aguas residuales existen de muchos tipos y para caudales pequeños no se puede construir una convencional ni tampoco los filtros verdes, para los que se necesitan grandes extensiones, o las de carrusel, para poblaciones mayores.

Se trata de una depuradora compacta porque el proceso biológico se desarrolla dentro de un gran tanque con unas dimensiones de 14 metros de largo y 3,5 metros de diámetro, que se ha anclado al suelo en hormigón.

Según Gómez, el proceso es "sencillo". El agua entra en un canal donde existe una reja de fino (para eliminar residuos flotantes con un diámetro superior a 5 centímetros). Luego pasa a un pozo donde existen dos bombas de elevación para que el agua residual se someta al pretratamiento donde funciona un sistema de eliminación de arenas y de grasa. Previamente pasa por un tamiz que retiene los elementos menores de 3 milímetros.

Todos los residuos retenidos se incorporan a un contenedor que después se tiene que retirar y se lleva al vertedero. Es entonces cuando el agua llega al reactor biológico, que está fundamentado en el principio de oxigenación total o de aireación continuada.

TRES FASES El proceso se desarrolla aquí en tres fases: primero un tiempo de aireación, que suministra oxígeno a los microorganismos que van a eliminar los desechos, posteriormente se para el aire y se produce la decantación, que consiste en que estos microorganismos se van al fondo del tanque y culmina con la evacuación de estos fangos, que se introducen en un espesador y el agua limpia residual se canaliza y se vierte en un regato próximo y de ahí al Guadiana. Estos vertidos estarán controlados por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG).

Se ha calculado que con 500 habitantes se obtienen 125 metros cúbicos al día de agua residual y la depuradora podría ser válida hasta para 600 habitantes. En la actualidad en el Corazón de Jesús viven unas 300 personas, que puede subir a 450 en verano. Según Gómez, el mantenimiento de estas instalaciones es muy simple, pues básicamente hay que retirar los contenedores de residuos cada quince días aproximadamente.

La canalización desde la barriada a la planta ya se ha realizado y atraviesa terrenos privados por la margen izquierda de la carretera, que hubo que expropiar, un proceso que motivó el retraso de esta obra, prevista en el Plan Director de Saneamiento con un presupuesto algo superior al millón de euros.