La Consejería de Sanidad, dentro de su área de salud mental, prepara la apertura de una unidad de hospitalización breve para niños y adolescentes --infantojuvenil-- en el Materno Infantil, según el subdirector de Salud Mental, Leopoldo Elvira. Este nuevo recurso está ya "diseñado, como la organización funcional, y dimensionado", pero queda por resolver "un problema estructural" que se abordará desde el Plan Director del Hospital Infanta Cristina, de Badajoz. "Cuando sea posible físicamente se abrirá", aunque de momento no hay fecha concreta.

Esta unidad es parte del proyecto de Sanidad para la salud mental, una de sus patas junto con la atención ambulatoria de los equipos infantojuveniles, y los ingresos de estancia media y larga. "Para eso están pensados los centros terapéuticos residenciales, que funcionan como unidades de convivencia sin olvidar los aspectos terapéuticos", pues se requieren intervenciones con el niño, la familia, o farmacológicas, señaló Elvira.

Las consejerías de Sanidad y de Igualdad, a través de la Dirección de Infancia y Familia, trabajan para definir el modelo de atención a la salud mental de niños y jóvenes, y estudian la creación de un centro específico de protección de menores con trastornos de conducta y en situación de riesgo, para atender los casos que requieran esta atención y que en la actualidad se derivan a otras comunidades.

14 MENORES DERIVADOS En concreto, hay 14 menores extremeños que han sido derivados a centros de esas características en Andalucía. En la región existen centros de acogida --San Juan Bautista-- y de aplicación de medidas judiciales --Marcelo Nessi--, que dependen de las instituciones competentes en menores, pero no hay ninguna de protección de niños y jóvenes con trastornos de conducta.

Sanidad trabaja con Infancia y Familia, que ya tiene un número de niños para este recurso. De momento, está diseñado "su aspecto y perfiles funcionales y profesionales, la cobertura, plazas, recursos humanos, el catálogo de prestaciones, cómo se derivan y cómo se da el alta"; pero todo eso está a la espera de su construcción y de definir la financiación y la gestión.

La obligación de la Subdirección General de Salud Mental, según indicó Leopoldo Elvira, es dar "respuesta sanitaria a la salud mental de la población infantil y adolescentes; a problemas sanitarios, pues los sociales se abordan en colaboración con otras instituciones".

Por ello, añadió, se "¡trabajan estrechamente con la Dirección General de Infancia, "con dos proyectos: uno es el diseño de un centro terapéutico residencial para niños y adolescentes, con el que responder a las necesidades que plantea Infancia y Familia, para niños que necesitan atención en salud mental por problemas de conducta que son muy dificil de atender en los centros de que disponen; ahora son 14". Pues hay que atender una necesidad "puramente sanitaria de niños con tal dificultad de control ambulatorio que necesitan un centro de características residenciales de estancias medias para su tratamiento".

PROYECTO MINISTERIAL Por otro lado, trabajan en un programa financiado por el Ministerio de Sanidad, para diseñar proyectos dirigido a menores con trastornos de conducta y otros problemas de salud mental bajo están en centros de acogida.

Ese programa comprende la formación de profesionales con nociones de psicopatología básica, para que tengan "capacidades de actuar en contingencias cotidianas, como problemas de conducta, amenazas, riesgo suicidas o inhibiciones depresivas", entre otras. Esta parte se ha iniciado ya en colaboración con el grupo de Investigación de Infancia y Familia de Universidad de Oviedo, "un grupo puntero" en el trabajo con niños en situación de desprotección.

Otra parte es hacer un análisis de la situación para ver cuántos niños de acogida presentan problemas de salud mental, qué atención reciben y cuál deberían recibir, con el fin de diseñar planes de intervención. En este aspecto se gestiona la contratación de un agente externo para su realización.

PREVENCION Un tercer punto es diseñar un modelo de prevención para detectar qué niños acogidos no presentan "aún problemas obvios de salud mental, pero que tienen muchos factores de riesgos para ello". La idea es detectarlos e intervenir precozmente. El programa se desplegará durante este año y de momento se cumplen los plazos.

En Badajoz se ven anualmente 569 niños y adolescentes nuevos por los equipos infantojuveniles y 3.800 revisiones; de ellos la mitad son menores con trastornos de conducta y una minoría por problemas de ansiedad y somatizaciones.