Hace justo un año, en enero del 2018, la junta directiva de la asociación Nueva vida, que desde hace casi 30 años desarrolla en Badajoz programas de atención a drogodependientes y sus familias, daba la voz de alarma ante su posible desaparición, pues necesitaba ayudas urgentes a corto plazo. El Ayuntamiento de Badajoz se había comprometido a facilitarles alguna subvención y un local, para así reducir los gastos de la asociación, que dejaría de pagar alquiler por el que ocupaban en la calle De Gabriel. Un año después, su futuro es más certero. Ayer inauguraban su nueva sede, situada en la calle Fray Luis de Granada, en San Roque, en un amplio espacio cedido por el consistorio, que además les concede una subvención nominativa de 4.000 euros.

La inauguración fue una fiesta, a la que no faltaron usuarios, familiares, profesionales y voluntarios vinculados a la asociación, además del alcalde, Francisco Javier Fragoso, la concejala de Servicios Sociales, Rosario Gómez y el diputado de Cultura y portavoz municipal socialista, Ricardo Cabezas. La presidenta de Nueva Vida, Toni Cintas, mostró su agradecimiento a las entidades que los están ayudando y a los profesionales que trabajan con esta asociación, gracias a los cuales ha podido seguir adelante, pues aceptaron continuar a pesar de que han estado meses sin cobrar. Durante el acto, también hubo menciones a la Fundación CB e Ibercaja, a la Obra Social la Caixa y a otros colectivos por su apoyo. Por Nueva vida pasan cada año 500 usuarios directos.