El casco antiguo pacense ha recibido un nuevo impulso en su proceso de recuperación con la primera actuación urbanística llevada a cabo en la calle El Brocense por la Inmobiliaria Municipal, donde acaba de terminar un edificio con ocho viviendas, separadas en dos portales, construidas sobre cinco solares ocupados hasta hace poco por edificaciones en estado ruinoso.

Esta nueva promoción modifica parcialmente la imagen de deterioro que presenta esta calle, pese a ser una de las arterias principales de acceso a la plaza Alta que comunica la plaza de España con los jardines de La Galera y la torre de Espantaperros, a través de la calle San Juan.

El alcalde Miguel Celdrán visitó ayer, junto con el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, y el gerente de la Inmobiliaria Municipal, Luis Chacón, las viviendas, que tienen garaje y trastero vinculados, y se han vendido, en su mayoría, a gente joven a unos precios que van de los 104.518 euros a 167.228 euros. Tiene tres plantas y cada portal dispone de ascensor. Además cuenta con tres locales comerciales. Los pisos son de tres tamaño, los hay de 64,93 metros cuadrados, 90,32 y 101,13.

LA APUESTA POR LA ZONA Celdrán reconoció que con esta obra "no solo se viene a rehabilitar una parte importante del casco antiguo sino a dar un tirón fuerte, junto con la iniciativa privada, de este enclave". En este sentido explicó que en el ayuntamiento ya hay proyectos de promotores privados en esta calle y en la calle San Lorenzo, perpendicular a El Brocense.

Por su parte, el concejal de Urbanismo confesó que la situación de esta calle le preocupaba especialmente, "y me sigue preocupando porque es un punto de acceso de todo el turismo que viene al casco antiguo". A título de anécdota contó que "saliendo una noche del párking de Santa María, vi a un matrimonio mayor que visitaba la iglesia de la Concepción y cuando vieron el aspecto que presentaba la calle El Brocense se dieron la vuelta".

Por ello, el ayuntamiento pretende, según dijo, que esta calle esté recuperada lo antes posible, "y sea una calle digna, porque tal y como estaba, y sigue estando, echa para atrás a mucha gente que sube a la plaza Alta, o al entorno de la alcazaba. Se iluminará y habrá nuevas actuaciones para que el público no se asuste y transite por ella". También reconoció que este tipo de actuaciones son "complicadas" en el casco antiguo por la atomización de las viviendas, las dificultades para averiguar la titularidad y para adquirir los solares.

MINI GERENCIA La apuesta por el casco antiguo también se verá con la puesta en marcha, en un plazo de uno a dos meses, de la oficina de gestión del casco antiguo, según Celestino Rodolfo, quien recordó que es una mini gerencia dedicada en exclusiva a todas las actuaciones urbanísticas que se lleven a cabo en el casco antiguo. "Será otro paso más para animar a la iniciativa privada a que venga".

De momento, estudian su ubicación, cuya sede podría estar en el local ubicado junto a Zara, en la calle Felipe Checa, o, con carácter provisional, en la oficina del Area de Rehabilitación Integral (ARI). Aunque el concejal anunció que uno de los espacios que se contemplan podría ser la edificación que la Inmobiliaria Municipal levantará junto a las antiguas Casas Consistoriales de la plaza Alta, "ya que tiene un uso institucional".