Las obras iniciadas el pasado verano avanzan en el colegio De Gabriel de Gévora, donde se están terminando de construir dos aulas de Infantil, con las que se aliviará al centro de los problemas de espacio. Además, se han empezado las obras de reforma en el patio, para salvar unos desniveles que ponían en peligro la seguridad de los niños, según Ana Arriero, vicepresidenta de la asociación de madres y padres (ampa) del centro.
Los padres y los alumnos del colegio de Gévora se manifestaron en reiteradas ocasiones reclamando actuaciones y denunciando la situación general del centro, repartido entre cuatro edificios antiguos separados por un vial que cada día tienen que atravesar los niños varias veces.
Sin embargo, los vecinos de la barriada de Llera continúan esperando la reanudación del nuevo centro, que según anunció Educación las obras podrían retomarse antes de final de año.
La construcción del colegio de Llera, que se paralizó en enero por la quiebra de la empresa, continuará tras la adjudicación provisional, aprobada por la mesa de contratación el 22 de septiembre, a la UTE formada por Ceinsa Contratas e Ingeniería y Lutra Ingeniería y Medio Ambiente, por un importe de 2.438.053 euros y un plazo de ejecución de nueve meses.
En el colegio Enrique Iglesias también están finalizando las obras de sustitución de la cubierta, donde hubo que hacer mediciones de amianto a petición de los padres, que al inicio de curso se negaron a llevar a sus hijos al centro hasta que no estuviera garantizada la seguridad de estos.
En el General Navarro los alumnos han podido por fin estrenar comedor después de varios años de espera por los conflictos con la construcción del pabellón multiusos en el patio, que concluyó en junio. Utilizan el comedor desde octubre.
