La intención de la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Badajoz es dar participación a las dos cajas de ahorro extremeñas --Caja Badajoz y Caja Extremadura-- en el accionariado de la futura sociedad que se encargará de gestionar la Plataforma Logística del Suroeste Ibérico. De momento estas entidades financieras no han tomado una decisión hasta que se reúnan sus correspondientes consejos de administración, según puntualizó ayer el presidente del Gobierno extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, tras la reunión que mantuvo en el Ayuntamiento de Badajoz con el alcalde Miguel Celdrán para concretar aspectos de este proyecto.
El capital social de esta empresa será de 6 millones de euros. El accionariado se distribuye en cinco partes, con un 20% cada una, que correspondería a la Junta, el ayuntamiento, cada caja tendría otro 20% y la Sepes (dependiente del ministerio y encargado de adquirir los terrenos y construir) otra quinta parte. Sepes estaba dispuesto a llegar al 100%, pero de esta manera, el 80% del capital es extremeño, una mayoría que ya acordaron el día anterior el alcalde y el consejero de Economía, Manuel Amigo, quien sin embargo no habló de la entrada de las cajas de ahorro.
ESTE MES Según Ibarra, esta mayoría extremeña será importante para que su continuidad no esté a expensas del que cambien los responsables del Gobierno central. El presidente de la Junta avanzó igualmente que la intención es que la sociedad esté constituida este mismo mes de julio. De momento, la ministra de Vivienda ya ha autorizado a que Sepes pueda comprar terrenos y a que constituya la sociedad mixta que ponga en marcha la plataforma.
Una vez creada la sociedad, tendrá que definir "con criterios realistas y de eficacia", según Ibarra, cuál es exactamente la plataforma que quieren construir, para adaptarse a la demanda. Aspiran a que sea "importante", parecida a la plataforma de Zaragoza (PLAZA). En cuanto a la inversión del Sepes, recordó que aunque en un principio se habló de 18 millones y en la reunión del Consejo de Ministros en Mérida se concretó en 60 millones de euros, en estos momentos "el Sepes está en condiciones de invertir lo que queramos". En cuanto a las dimensiones, tampoco se ponen límites. "Sepes aportará recursos económicos suficientes, sin límite de espacio ni de dinero", remarcó.
EN LA FRONTERA La ubicación está clara. Las condiciones iniciales son que se ubique en la frontera y localizada en un nudo de comunicaciones ferroviarias y por carretera. El sitio es Caya, pero está por definir el lugar concreto pues aunque el nuevo Plan General de Ordenación Urbana tiene reservado un espacio, Ibarra se mostró de acuerdo con el alcalde en que no es obligatoria esta designación y todo dependerá del precio al que se oferten los terrenos en esta zona, dado que cuánto más barato se adquiera el suelo, menos costará luego la parcela, porque además, el presidente de la Junta defendió que el producto "será de calidad y lo más barata posible".
Respecto a la participación portuguesa, hoy está prevista una reunión en Mérida con la secretaria de Estado del país vecino, que debería decidir si se ajusta al proyecto de Badajoz o lo complementa.
