El equipo de gobierno municipal, sin mayoría suficiente, esperó hasta el último día del año para sacar adelante tres proyectos que reavivan la actividad de la Inmobiliaria Municipal (Inmuba), con actuaciones en otros tantos poblados que requieren el aval del ayuntamiento para conseguir los préstamos bancarios, que superan los 4 millones de euros. Aunque los tres grupos de la oposición no tenían un acuerdo previo para frenar estas operaciones y a lo largo del debate pareció que saldrían adelante sumando apoyos con distintas combinaciones, finalmente, tras más de una hora de argumentos infructuosos, consiguieron bloquear estos proyectos y dejarlos sobre la mesa.

Si el aval no se aprobaba ayer en el pleno extraordinario convocado con este único fin, habrá que esperar a que se aprueben los presupuestos municipales del 2017 y pueden tardar 3 o 4 meses en entrar en vigor, según avisó el alcalde, Francisco Javier Fragoso.

En concreto, el aval se pedía para la promoción de 26 naves industriales en Balboa, 7 viviendas en Villafranco y 20 en Gévora. El concejal socialista Fernando Carmona cuestionó los estudios de viabilidad de las viviendas, cuya proyección económica es «demasiado optimista» y el aval supone asumir un riesgo para las arcas municipales, por lo que el PSOE votaría en contra y se abstendría con el de las naves de Balboa. Podemos Recuperar Badajoz, sin embargo, estaba más a favor de apoyar el aval de las dos promociones de viviendas, cuyo préstamo se va a firmar con Triodos Bank, de banca ética, con cuya filosófía coincide esta formación y además su portavoz, Remigio Cordero, consideró justificada la viabilidad en los poblados pero estaba dispuesto a parar el proyecto para forzar al PP a que presente los presupuestos del 2017 No pensaba lo mismo el portavoz de Ciudadanos, que sí estaba a favor de las naves en Balboa.

El concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, recalcó que en los últimos 20 años «ni una sola promoción de la Inmobiliaria Municipal ha tenido pérdidas», pero la última promoción data del 2012 y se terminó en el 2014 y el estocaje no se vendía. El concejal reclamó a la oposición no convertir a las familias demandantes en rehenes de la falta de diligencia del equipo de gobierno. Para Rodolfo, la prueba de que estas promociones son factibles es que las apoyan los bancos, a lo que Carmona añadió que si conceden los préstamos es por el aval del ayuntamiento, no por la garantía hipotecaria.