José Ortega Cano fue sometido el viernes a un cateterismo cardiaco en la clínica Ruber Internacional de Madrid. La operación estaba prevista para marzo, pero el inminente ingreso en prisión del extorero ha hecho que se adelante la intervención, lo que ha sido interpretado como una estrategia para retrasar el mayor tiempo posible su entrada en la cárcel. Otras fuentes han insinuado que el viudo de Rocío Jurado va a esgrimir sus problemas de salud para conseguir el indulto del Gobierno, que ayer fue solicitado por su abogado. La fiscalía ya ha anunciado que se opondrá a la medida de gracia.

La semana pasada, fuentes judiciales señalaron el 27 de diciembre como el día en que Ortega Cano debía empezar a cumplir la condena de dos años y seis meses que le impuso la Audiencia de Sevilla por el homicidio imprudente de Carlos Parra y por conducir de forma temeraria bajos los efectos del alcohol.

ESPECULACIONES El exdiestro tiene complicado eludir la cárcel. Si bien es cierto que desde el 2006 arrastra problemas de salud que lo han llevado a ingresar en el hospital en varias ocasiones por sufrir fuertes arritmias, el cateterismo no era una prueba urgente, razón por la que se había programado para el mes de marzo. La coincidencia de la intervención con la anunciada fecha de ingreso en la cárcel ha desatado las especulaciones.

El extorero ingresó en el hospital Ruber Internacional sobre las siete de la mañana acompañado de su actual pareja, Ana María Aldón, y de dos de sus hermanos. Tras la prueba, la clínica emitió un comunicado en el que destacaba que todo había ido bien aunque se habían detectado "lesiones en las arterias coronarias", que están pendientes de evaluación para decidir el tipo de tratamiento que se dará al paciente. ¿Esto quiere decir que Ortega Cano podría permanecer algunos días en la clínica? No ha habido contestación.

El extorero tiene de plazo hasta el 7 de enero para ingresar en la prisión de Sevilla 2, donde permanece su hijo José Fernando desde el 14 de noviembre. acusado de robo violento, hurto de un vehículo, daños, contra la seguridad del tráfico y lesiones. Lo normal es que no coincidan dentro del centro penitenciario ya que estarán en módulos diferentes. José Fernando en el de preventivos y Ortega Cano en el de penados.

Según la familia Ortega Cano, esa es la gran preocupación del extorero, su hijo, al que piden cinco años de cárcel. Si Rocío Jurado levantara la cabeza.