El SUP estudia posibles acciones legales después de saberse que el segundo de los agentes que el pasado día 23 trasladaron a un preso que padece una tuberculosis muy contagiosa, también tendrá debe someterse a tratamiento durante seis meses. Los agentes estuvieron expuestos durante un traslado de la prisión al Hospital Perpetuo Socorro.

El SUP exige "un protocolo coordinado por la Delegación del Gobierno con los centros penitenciarios y la policía" para regular las condiciones sanitarias de los traslados.

La delegada del Gobierno, Carmen Pereira, manifestó ayer que son "los médicos de la prisión centro penitenciario los que tienen la capacidad para determinar cómo se hacen estos traslados y la gravedad de la patología que sufren estos enfermos", así como para advertir a los agentes que custodian a los presos "sobre si necesitan algún tipo de protección".

Pereira dijo que se prepara una reunión con el SES, la policía e Instituciones Penitenciarias para analizar los convenios en materia de seguridad sanitaria en los traslados de reos, que ya han reducido las salidas un 50%, y garantizar la seguridad de los agentes mediante un protocolo.