Cansados de esperar, han decidido pasar a la acción. La asociación de padres y madres (ampa) del colegio De Gabriel, en Gévora, ha convocado esta mañana una manifestación para exigir a la Consejería de Educación que construya un nuevo centro para acabar con el problema de espacio que presenta el actual, que ahora se divide en un edificio principal y aulas habilitadas al otro lado de la calle. La protesta partirá a las 8.30 horas de la puerta del ayuntamiento para acabar en el colegio. El próximo martes, si la consejería no mueve ficha, volverán a protestar.

Esta manifestación estaba convocada inicialmente para el 1 de marzo, pero el ampa decidió suspenderla después de que la consejera de Educación, Esther Gutiérrez, les emplazase a una reunión en Mérida esa misma semana. Entonces, según explicó ayer la presidenta de la asociación de padres y madres de alumnos, Alicia Sánchez, les trasladó que estaban pendientes de la aprobación de los presupuestos regionales y que hasta que estos no tuviesen luz verde no podía decirles qué se iba a hacer. Las cuentas extremeñas ya se aprobaron la pasada semana y, para decepción de los afectados, no aparece ninguna partida concreta para esta infraestructura.

Esto ha hecho que la ampa se movilice, pues, según Sánchez, no están dispuestos a que sus hijos sigan en unas instalaciones que no reúnen unas condiciones mínimas. En este sentido, recordó que las dos aulas externas al centro, que acogen a los niños de Infantil, obligan a que estos alumnos tengan que cruzar la calle a la hora del recreo, si tienen clase de gimnasia o para ir al comedor. El pasado viernes, según la presidenta de la ampa, técnicos de la Junta visitaron la pedanía para ver cómo podían adaptar otro local como aula para poder resolver de cara a septiembre la falta de espacio para albergar a más alumnos. "Son aulas lúgubres, con más de 50 años", aseguró Sánchez, quien dijo que los padres solo aceptarán esta solución provisional si hay un compromiso "firme y por escrito" de Educación para hacer el nuevo colegio.

No es la primera vez que los padres de alumnos del colegio De Gabriel protestan por las condiciones del centro. La ampa lleva siete años denunciando sus problemas pero, pese a que en las dos anteriores legislaturas se les prometió una solución, nunca han visto avances. En un principio, los padres se mostraron conformes con que al actual centro se incorporase la calle que lo separa de las aulas externas. Pero ahora creen que eso solo sería "un parche", por lo que piden que se construya uno nuevo junto al instituto, en unos terrenos cedidos por el ayuntamiento. Esta opción fue la que también defendió el alcalde, Francisco Javier Fragoso, en su reciente reunión con la consejera.

EDUCACION Por su parte, fuentes de Educación señalaron ayer que, una vez aprobados los presupuestos regionales, la consejería presentará en la Asamblea de Extremadura el nuevo Programa de Inversiones en Infraestructuras y Equipamientos Educativos de Extremadura y será entonces cuando se den a conocer las actuaciones previstas hasta el 2020. No obstante, la consejería reiteró que es "consciente" y está "muy sensibilizada" con el problema de espacio que sufre el colegio De Gabriel, por lo que sigue buscando la solución "más adecuada" a las necesidades de la comunidad educativa.

Los padres, según anunció ayer la presidenta del ampa, están dispuestos a acudir al Defensor del Menor si no se da una solución a este problema, porque consideran que sus hijos merecen estudiar en unas condiciones dignas. El colegio, construido hace más de tres décadas, cuenta con 300 alumnos y ya se tuvo que suprimir el aula de informática para paliar la falta de espacio. Además, la biblioteca se usa también como almacén y el patio de recreo es muy pequeño.