El pantano de Peña del Aguila, en Villar del Rey, que abastece de agua a la población de Badajoz y otras localidades del entorno, seguía ayer aliviando agua, con una lámina ya más pequeña, de unos 6 o 7 centímetros, porque una semana antes llegó a ser hasta de un metro. Según recordaba ayer José Martínez, director técnico de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), esta presa no superaba su capacidad, que es de 130 hectómetros cúbicos, desde hace cuatro años, que vertió agua por los aliviaderos.

PARA TRES AÑOS Este pantano se encuentra por encima del 100% de su capacidad desde hace dos semanas. La primera semana de noviembre ya vertió con una lámina de 60 centímetros. Esta situación garantiza el suministro para al menos los tres próximos años. El técnico de la CHG señala que Peña del Aguila es un embalse "muy agradecido", si llueve en la sierra de San Pedro, "prácticamente casi todo lo que cae corre" y si llueve sobre mojado, como es el caso, entra más agua. La lluvia recogida esta semana ha sido de 258 milímetros, superior incluso a la pasada, que fue de 231.

Como las previsiones meteorológicas apuntan a que continuará lloviendo estos días, el embalse seguirá aliviando. No obstante, la confederación tiene previsto bajar un poco la lámina para no mantener el embalse a la cota máxima, porque si cae un turbión como el de hace una semana no habría capacidad. Eso significa que la CHG va a seguir turbinando para tener unos resguardos de seguridad, no mucho, hasta un tope de 90 hectómetros cúbicos, de los 130 que hay ahora, porque queda por delante todo el invierno.

El año pasado por estas mismas fechas, en plena sequía, el embalse se encontraba al 70%. La situación de este año no es solo mejor por las lluvias recientes, sino que José Martínez apunta que la pasada primavera en un solo día una tormenta aportó en torno a 25 hectómetros cúbicos, que es lo que consume durante un año toda la población que abastece.