Los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) responsables del proyecto de restauración y adecuación de la dehesa de Tres Arroyos han propuesto que, una vez terminadas las obras que se llevan a cabo desde julio del 2004, se proceda al cierre de los accesos a esa espacio natural por la noche, con el fin de protegerlo de actuaciones que lo degradan. El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Badajoz, Alejandro Ramírez del Molino, manifestó, que así se hará cuando el ayuntamiento recepcione las obras.

Este anuncio se hizo durante la visita de la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, con el presidente de la CHG, José Ignacio Sánchez, el citado concejal y director técnico del organismo gestor del proyecto, José Martínez, al parque de Tres Arroyos, cuyas obras se hallan en el ecuador del plazo de ejecución, que concluye a principios del 2006, y cuyos efectos se pueden apreciar ya en la limpieza der la zona, del arbolado o en el arreglo de caminos.

Pereira recordó que las actuaciones en el parque, de 243 hectáreas, se hacen mediante el programa AGUA y el Plan Hidrológico Forestal de Medio Ambiente, con un presupuesto de 972.654 euros, financiado en un 75% por la CHG a través de fondos europeos, y un 25% por el ayuntamiento.

VALOR ECOLOGICO Y SOCIAL La delegada destacó que este espacio representativo del monte mediterráneo es una dehesa de gran valor ecológico y uso social durante todo el año, dada su proximidad a la ciudad, especialmente los fines de semana y en la romería de San Isidro, que se celebra el próximo domingo y a la que las obras no afectan para nada, según Del Molino.

Pereira, ante el estado de degradación que presentaba Tres Arroyos, hizo una llamada a los ciudadanos para que usen con responsabilidad el parque y colaboren en su mantenimiento.

Las actuaciones consisten en la limpieza de la finca, instalación de 13 puntos de recogida de basuras distribuidas en 8 zonas de ocio y recreo, con 80 mesas, 24 bancos, 15 barbacoas y juegos infantiles, en una superficie de 419.137 metros cuadrados, con un nuevo circuito deportivo de 3.500 metros. Prevé también plantación de especies autóctonas; acondicionamiento de los accesos al parque, que serán 8; cerramiento; restauración de pasos de agua y construcción de otros más en los nuevos trazados, incluido un badén sobre el arroyo principal; sendas peatonales con bancos de madera; ocho zonas de aparcamiento en los accesos y tres miradores, además del tratamiento de la flora y el arbolado, podas, etc.