Hay quien se acuerda aún de cuando entraba a mirar la cartelera de cine o se pesaba en una báscula de hierro de color verde que funcionaba con pesetas y hay otros que ni siquiera se habían percatado de su existencia hasta ahora. El mercado navideño que se inauguró el viernes por la tarde en el pasaje de San Juan ha hecho que muchos ciudadanos redescubran este espacio, antaño lleno de vida, y que otros lo hayan pisado por primera vez.
Hasta el 5 de enero, todos los fines de semana (los viernes solo en horario de tarde y los sábado y domingos durante todo el día) doce comerciantes y artesanos estarán instalados en este pasaje para ofrecer sus productos al público: decoración, moda, complementos, plantas, artesanía o perfumes, entre otros. Una alfombra roja, grandes globos, música y luz propician el ambiente navideño en el pasaje. La iniciativa, propuesta por la nueva Asociación de Comerciantes, Emprendedores y Artesanos del Casco Histórico (Accho), forma parte de las actividades organizadas por el Ayuntamiento de Badajoz para la dinamización del comercio minorista durante la campaña de Navidad.
«Llevo mucho tiempo trabajando en esta zona y una frase muy generalizada al pasar por aquí era ¡qué pena!, pero ahora se ha cambiado por ¡qué bonito! y ¡qué alegría!», comentaba ayer Marciana Pulido, vicepresidenta de Accho. Los expositores confían en que el público respalde esta propuesta y cumpla su objetivo: atraer a gente al Casco Antiguo y mostrar la cara «amable» y a veces poco conocida de un barrio que es de todos los pacenses.
