En casa de Diego Cachero casi todo el año es Navidad pues este hombre, apasionado de la tradición belenista, empezó a montar su nacimiento en abril y ocupa dos habitaciones de su vivienda. Cachero es el presidente de la Asociación de Belenistas de Badajoz, que se ha encargado de montar el Belén Monumental que estos días pueden visitar los pacenses en el Museo de la Ciudad.

Junto al belén, el museo acoge una muestra de 22 dioramas, procedentes de la asociación de Jerez de la Frontera, a excepción de dos trabajos de belenistas de la ciudad: el propio Cachero y Pedro Pérez.

El alcalde, Miguel Celdrán, inauguró ayer los dos espacios, que significan la recuperación de una tradición que contribuye "a fomentar la Navidad". Celdrán destacó que la asociación ha tardado en montar el belén casi tres meses, "con lo que algunas figuras tendrán ya hasta vida", bromeó.

LA PECULIARIDAD En el Belén Monumental amanece cada dos minutos y, al anochecer, surge un ángel iluminado dentro de una pequeña cueva, bajo un cielo estrellado con fibra óptica. Todo el escenario está hecho a base de porespán, más conocido como corcho blanco, con capas de escayola y distintas pinturas. Las construcciones, como las fallas, se destruyen cuando termina cada Navidad.

Cada diorama supone unos diez días completos de trabajo. Un diorama es una escena navideña, encerrada en un cajón y, por tanto, trasladable. En Badajoz no existe tradición de esta especialidad, que procede de Jerez. Hace tres años se formó la asociación y poco a poco ha ido ganado adeptos.