Los peatones, los ciclistas, empresarios y trabajadores de la industrias existentes en el tramo urbano de la BA-20, antigua N-V, y sobre todos los escolares del Instituto Reino Aftasí y otros centros de la zona, estrenaron las nuevas instalaciones y medidas de seguridad contemplados en el proyecto de mejora de la seguridad vial y reordenación urbana que el Ministerio de Fomento ha realizado en dicha vía y que ayer entraron en servicio.
La reforma de esta travesía urbana en un tramo de 1.850 metros --del kilómetro 3.025 al 4.875--, entre el cruce de la carretera de Sevilla y el Instituto Reino Aftasí, se adjudicó a Audeca el 8 de junio del 2008 y ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros, dentro del Plan E. El origen del proyecto fue la reclamación de la comunidad escolar del citado centro por la seguridad de sus cientos de alumnos, si bien se amplió a los accesos a las empresas de la zona y reordenación del tráfico en ese tramo.
La delegada del Gobierno, Carmen Pereira, recorrió ayer el vial para ver los nuevos acerados, el carril bici, la nueva iluminación, las barandillas peatonales instaladas y los 500 árboles plantados. Estuvo acompañada por el jefe de la Demarcación de Carreteras, Blanco Segarra; el director de la obra, Antonio Ruiz Roso, y otros técnicos.
La obra ha consistido en la construcción de acerados de 2,5 metros en ambas márgenes de la vía, un carril bici, de 2,2 metros en la margen izquierda desde la N-432 hasta el Reino Aftasí. También una nueva red de saneamiento bajo las aceras con sumideros, 888 metros de barandilla peatonal, 18 puntos de luz simples y 16 dobles, 10 báculos semafóricos, renovación de la señalización horizontal y vertical y se han plantado más de 500 árboles.
Pereira explicó que "la vía ya está en servicio", aunque, según Ruiz Roso, "está a falta de algunos remates". Con motivo de la obra, Ruiz Roso planteó la necesidad de planear el urbanismo con miras al largo plazo, y en esta zona, alejándose en lo posible de la vía, para futuras ampliaciones en caso de necesidad. Una de las dificultades del proyecto estuvo en los accesos a las empresas radicadas en esa vía, por estar a diferentes cotas, anchura y distancia de la carretera y entre sí.
La delegada del Gobierno recordó que que Fomento ha invertido en Badajoz 40 millones de euros en los últimos seis años, aparte de la inversión del AVE, en el desdoblamiento de la antigua N-V hasta su conexión con la A-5, el aeropuerto, la reordenación del tráfico hasta Talavera, aún en ejecución, entre otros proyectos. Uno pendiente es la instalación de un segundo pretil de seguridad, de acero, en el puente de la Universidad, cuyo proyecto está redactado y pendiente de licitar, lo que se hará "lo antes posibles", según Pereira.
