La plaza de la Constitución comenzó a ayer a funcionar como rotonda a modo de prueba. En función de los resultados que, tras la experiencia de ayer se prevén satisfactorios, este punto se convertirá definitivamente en una glorieta la próxima semana, según informaron fuentes de la policía local.

El objetivo de esta actuación, que se acomete con cargo al remanente de tesorería y del que ya se planteó en una Comisión Informativa de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes a principios de este año, es dar fluidez a la circulación en este céntrico cruce, ahora regulado con semáforos. No obstante, estos últimos no desaparecerán, al menos de momento.

Los principales cambios que introduce esta reordenación del tráfico es que se prohíbe el giro a la izquierda desde la avenida de Europa hacia Pardaleras, así como desde Enrique Segura Otaño a la avenida de Europa. Asimismo, los conductores que circulen por la avenida de Europa y la de Fernando Calzadilla tendrán la posibilidad de cambiar el sentido de la marcha en esta glorieta, evitando, como ocurría hasta ahora, tener que llegar en un caso hasta la calle La Bomba y en otro hasta el cruce con la autopista para dar la vuelta.

En la avenida Enrique Segura Otaño se ha anulado un tramo del carril más cercano a Cortefiel (que ahora se utilizaba para girar hacia la avenida de Europa), donde se habilitarán nuevas plazas de aparcamiento (de momento se ha protegido con vallas, pero aún no se permite estacionar). Los aparcamientos en batería del otro lado de la calle se mantendrán. Tampoco está previsto modificar ninguno de los cuatro pasos de peatones de este cruce, que están regulados por semáforos. La actuación sí incluye el repintado de estos pasos de cebra.

Según explicaron ayer fuentes de la policía local, este punto no es especialmente conflictivo respecto al tráfico (salvo en épocas como la Navidad al concentrarse numerosos establecimientos comerciales en el entorno), aunque sí es verdad que la situación de la fuente en la plaza ha llevado al equívoco a muchos conductores, fundamentalmente de fuera de la ciudad, que la han confundido con una rotonda y, por tanto, la han utilizado como tal.

Como ya se hizo en su día con la rotonda en el cruce del puente de la Autonomía con la carretera de Cáceres, el lugar se ha señalizado de manera provisional para evaluar los cambios introducidos. Los agentes de la policía local estudiarán in situ y en diferentes franjas horarias del día cómo está funcionando la glorieta, para después pasar a señalizarla de manera definitiva.

La previsión es que no haya ningún problema para que los conductores se acostumbren a los cambios y la plaza se podrá convertir en tan solo unos días en rotonda. La actuación, que consiste principalmente en la señalización de la glorieta, tiene que estar acababa antes del próximo 31 de diciembre al estar incluida en el paquete de proyectos del Plan de Impulso a la Economía Local de este año.