El coordinador de la comisión de Sanidad y Políticas Sociales del PP en la Asamblea de Extremadura, José Angel Sánchez Juliá, denunció ayer el cierre de la Unidad de Emergencias en Badajoz 112 "por falta de personal", una situación que la Junta negó y calificó de "mentira".

El diputado popular señaló que, según había conocido por denuncias de pacientes y profesionales, el vehículo de intervención rápida , que opera en el turno de mañana, se quedó fuera de servicio por no haberse cubierto la plaza de enfermero, como ya solicitó su grupo al SES el pasado 15 mayo. "Se trata de una auténtica chapuza", criticó Sánchez Juliá, quien alertó de que sin este vehículo, en Badajoz solo se cuenta con la Unidad Medicalizada (UME), "por lo que si se producen en la ciudad dos urgencias simultáneas, la atención se vería seriamente comprometida y se pondría en riesgo a los ciudadanos", dijo.

A esta situación "caótica", según el PP, se suma el cese del coordinador de la Unidad de Emergencias, efectiva desde el pasado 27 de junio y cuyo puesto aún no se ha cubierto.

Frente a esta versión "alarmista" de los populares, según la Junta, la Consejería de Sanidad y Política Social aclaró ayer que el Vehículo de Intervención Rápida adscrito al servicio 112 no tuvo enfermero a lo largo de la mañana de ayer, aunque estuvo atendido "por un médico y un técnico". Esta circunstancia no impidió su funcionamiento y "por tanto, en ningún momento ha estado desatendido y no ha ocurrido ninguna incidencia que haya requerido actuaciones extraordinarias". El problema, según Sanidad, surgió "por una inesperada vacante", a la que no se encontraba sustituto en la bolsa, un hecho que se resolvió la misma mañana de ayer con la firma de un contrato "que solucionará puntualmente esa baja". La Unidad Medicalizada de Emergencias (UME) funcionó con "normalidad".