La policía local ha detenido a un conductor de 50 años que, tras ser sorprendido circulando ebrio al volante, propinó puños y patadas a los agentes cuando le iban a realizar la prueba de alcoholemia. Los hechos sucedieron la madrugada del pasado sábado, cuando la Guardia Civil de Tráfico observó cómo un turismo circulaba de forma "extraña" por la avenida Luis Movilla. El conductor fue interceptado y cuando la policía local acudió al lugar para practicarle el test de alcoholemia, éste se negó de manera rotunda y reaccionó de forma violenta contra los agentes, por lo que fue detenido acusado de conducir bajo los efectos del alcohol, negativa a realizarse la prueba y atentado contra la autoridad.

Por otro lado, el domingo por la tarde la policía tuvo que intervenir para interceptar a un conductor de 37 años que estaba realizando trompos en la rotonda de Caldas da Rainha. El 112 alertó de que el hombre estaba circulando de manera temeraria, a gran velocidad y dando vueltas a la glorieta. El conductor presentaba evidentes síntomas de encontrarse en estado de embriaguez, hasta tal punto que fue imposible realizarle la prueba de alcoholemia.