Un caballo que al parecer escapó de una finca de Valdebótoa mantuvo en jaque a la policía local durante la madrugada y la mañana de ayer, hasta que los agentes del turno de día lograron atraparlo y ponerlo a buen resguardo en una finca veterinaria de la ciudad.

El animal se paseaba por diversos tramos de la avenida de Elvas cuando la Sala del 902 recibió, hacia las 3.15 horas, el aviso de que un caballo andaba suelto poniendo en peligro el tráfico rodado en dicha vía.

Agentes de la policía local acudieron al lugar y localizaron el équido, al que persiguieron sin fortuna durante horas. El caballo correteaba por los campos aledaños a la avenida, cruzaba a las rotondas y entraba en espacios como las inmediaciones de la tienda de artículos de deportes que construyen en la zona.

Los policías lograron coger en varias ocasiones al animal, si bien éste logró escabullirse en todas ellas. Una de ellas pudieron retenerlo con una cuerda, pero la rompió y volvió a campar a sus anchas. Hacia las 8.00, la policía local pidió ayuda a los bomberos, que se sumaron a la persecución, sin que pudieran cogerlo hasta varias horas después, hacia las 11.00 horas.

Una vez inmovilizado, la policía local obtuvo el compromiso de la finca veterinaria La Extremeña para hacerse cargo del caballo, y lo trasladó en un remolque a una finca de su propiedad en la carretera de Olivenza.

La policía local, que averiguó que el caballo procedía de una finca de Valdebótoa, seguía buscando al propietario del animal y haciendo las gestiones oportunas para identificarlo, por las responsabilidades en que hubiera podido incurrir, pues podría ser imputado por un delito contra la seguridad vial, según fuentes de dicho cuerpo de seguridad.