LA POLICIA local detuvo el domingo por la tarde a un hombre y a una mujer acusados de agredirse mutuamente. Fue un vecino del bloque de pisos donde se produjo la disputa el que alertó a los agentes que, cuando llegaron, encontraron a un varón de 55 años sangrando abundantemente por la cabeza y con restos de sangre en su ropa. El hombre aseguró que su expareja, una mujer de 39 años, le había agredido. Esta, a su vez, declaró a la policía que el varón había llegado ebrio a su domicilio, la había tirado al suelo y arrancado mechones de pelo y que para defenderse lo empujó y al caer al suelo se golpeó con una banqueta. Ambos fueron trasladados a un centro médico y detenidos por un presunto delito de violencia de género.