Los dos radares móviles de la Policía Local de Badajoz --la primera de este cuerpo en la región que dispondrá de ellos-- estarán operativos tras las navidades, una vez que los agentes hayan recibido un curso de formación para manejarlos. Los cinamómetros, que han costado 48.088 euros, fueron presentados ayer por el alcalde, Miguel Celdrán, el concejal de la Policía Local, Germán López Iglesias, y el superintendente, Juan José Venero.
Los aparatos, de última tecnología y a prueba de inhibidores, se colocarán de forma rotatoria en diferentes vías de la ciudad.
Para ello, según explicó Venero, se seguirá un estudio del departamento de accidentes que determina las vías de la ciudad donde se ha comprobado que el exceso de velocidad ha sido uno de los factores que más se repetía en los siniestros que se han producido.
ALGUNOS FINES DE SEMANA Aunque no detalló de qué vías en concreto se trata, López Iglesias sí adelantó que una de ellas será la carretera de Circunvalación. Funcionarán de noche y de día y estarán operativos en horario de mañana y tarde fundamentalmente los días laborables, pero también se utilizarán algunos fines de semana.
Estos radares detectan todo tipo de vehículos y hasta una velocidad de 320 kilómetros por hora. Tienen capacidad para almacenar hasta 400 fotografías --que se proporcionará al infractor si la solicita, aunque no llegará a casa con la comunicación de la sanción-- y las imágenes se pueden descargar en el mismo lugar donde están colocados con un simple lápiz de memoria.
Los radares son autónomos, pero cerca de ellos se situará una pareja de agentes para custodiarlos. Aunque no es obligatorio, siempre que sea posible los policías comunicarán a los infractores que el radar los ha pillado con el objetivo de que su infracción no se quede solo en la sanción, sino que se conciencien.
El alcalde insistió en este último objetivo y aseguró que los radares no tienen un fin recaudatorio, sino que buscan "sensibilizar" y educar a los conductores para que respeten los límites de velocidad establecidos.
El alcalde quiso --un día después de la segunda protesta en menos de una semana de la policía local para denunciar falta de medios y recursos del cuerpo-- hacer un balance del servicio. Así recordó que se han comprado 10 vehículos, 250 transmisores, una grúa y que en breve dispondrán de los nuevos uniformes y cuatro motos más. Asimismo, se refirió a que ya se está redactando el proyecto de la nueva comisaría y que en los presupuestos del 2010 está recogida la convocatoria de 11 nuevas plazas de policía y previstas otras "6 u 8 más" para el 2011.
En cuanto a las ya anunciadas cámaras de vigilancia de los cruces semafóricos (denominados fotorrojos), López Iglesias señaló que estarán instaladas en "dos o tres meses". Habrá dos cámaras, pero se colocarán carcasas en una decena de puntos para que se puedan ir cambiando. El concejal de Policía Local destacó que como los conductores no sabrán dónde está la cámara, las carcasas también servirán de medida disuasoria.
