A medida que haya disponiblidad presupuestaria, el Ayuntamiento de Badajoz acometerá la reordenación del tráfico en varios puntos de la ciudad convirtiendo cinco intersecciones en rotondas, según avanzó ayer el primer teniente de alcalde, Germán López Iglesias, tras la reunión de la Comisión Informativa de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes, a la que asistieron el superintendente, Rubén Muñoz, y el fiscal de Tráfico, Diego Yebra.

En la reunión se abordó la conveniencia de sustituir por dos glorietas los cruces semafóricos que funcionan en el entorno de la plaza de toros: en las intersecciones de la avenida de Pardaleras con la calle Rivillas (pasarela) y con Antonio Cuéllar Gragera. También se convertirán en rotondas los cruces de la avenida de José María Alcaraz y Alenda con Tomás Romero de Castilla (gimnasio Puerta Palmas) y con Godofredo Ortega y Muñoz. Por último, se reordenará el tráfico de la plaza de la Constitución (Cortefiel) para que también funcione como rotonda. En este punto se plantea el problema de que en Segura Otaño existen tres carriles en un mismo sentido y en la glorieta sólo hay dos, lo que podría solucionarse utilizando uno para aparcamientos.

Por otro lado, se va a estudiar la posibilidad de eliminar el paso de peatones que existe en mitad del tablero del puente Real, donde se han producido dos atropellos de ciclistas en las últimas semanas, a pesar de que el límite de velocidad está indicado con luminosos. La intención es colocar una mediana que impida a los peatones cruzar. Como el puente es propiedad de la Junta de Extremadura, el ayuntamiento tiene que pedir permiso a la administración regional. Además, si desaparece el paso de cebra, habría que limitar la velocidad de los conductores. Se hará con un radar de tramo, que capta imágenes de todos los vehículos y multa a los que tardan en cruzar el puente menos tiempo del estipulado.