La policía no encuentra el arma utilizada en el homicidio de la barriada pacense de Suerte de Saavedra

Galán aclara el caso se encuentra bajo secreto de sumario, pero se detuvieron a dos personas, que responden a las iniciales de J. I. M. B. de 49 años y M. D. M. B. de 23 años, como presuntos implicados en la muerte homicida, que tienen como parentesco ser padre e hija.

Según recoge la agencia Europa Press, el jefe superior de la Policía recuerda que agentes adscritos a la Brigada Central de Homicidios y Desaparecidos de la UDEV Central formando equipo con agentes de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Badajoz, procedieron el pasado día 29 de abril a la detención de estas dos personas presuntamente implicadas en el homicidio.

Añade, que tal y como indica el "protocolo", se contó con la colaboración de un equipo de Madrid que se dedica con "exclusividad" a esclarecer este tipo de delitos, y que trabajó "codo con codo" con los agentes extremeños.

Ángel Galán subraya que ha sido una "investigación muy complicada" en la que se tenían cuatro hipótesis sobre posibles móviles del homicidio y una principal, de forma que el trabajo se basó en ir descartando hipótesis para "quedarse con las factibles y poder demostrarlas".

En este sentido, resalta que así se pudo "detectar" la hipótesis principal sobre que los presuntos autores eran personas del "entorno social, que no familiares" de la víctima, y se trabajo en esta línea para poder probarlo judicialmente.

Las diligencias tramitadas, junto con los detenidos, fueron remitidas al Juzgado de Instrucción número 2 de Badajoz, en funciones de guardia en esos momentos, que decretó el ingreso en prisión de ambos a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Badajoz, que es el conocedor e instructor de los hechos.

Galán recalca que con la investigación y las comprobaciones realizadas el cuerpo está "convencido" y que se ha trabajado con "dirección y conocimiento constante" del Ministerio Fiscal y el magistrado juez que llevan caso, que "han dado la autorización para hacer el registro" y "sabían" cuando se iba a proceder a la detención.

El jefe de la policía indica que deja "demostrado que la detención no es ilegal y que por lo menos indicios criminales hay", lo que "no quiere decir que el instructor no pueda considerar que tenga que dejarles en libertad".

Concluye que al "parecer" de la Policía Nacional hay "pruebas suficientes" y que el cuerpo tiene "el convencimiento moral de los hechos y por tanto" que se manda a la justicia "con todas las de la ley", pues se ha cumplido "a raja tabla con la ley en todos los aspectos".