Siete internos --cuatro según los datos de la Dirección General de Infancia y Familia-- del Centro de Reforma de Menores Marcelo Nessi, dependiente de la Junta de Extremadura, protagonizaron un intento de motín la tarde del pasado día 16 de agosto, que requirió la presencia de las fuerzas antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía, con cuya intervención finalmente se resolvió la situación.

No obstante, en un principio intervinieron los vigilantes del cuerpo de seguridad del centro. Según datos facilitados por el delegado sindical de SGTEx, Rafael Bravo, y de un trabajador del centro, fueron éstos quienes lograron controlar a los jóvenes, de modo que cuando llegaron los agentes de la policía no tuvieron que actuar. Sin embargo, fuentes del departamento de Infancia y Familia señalaron que la situación se controló y se redujo a los jóvenes cuando acudieron las fuerzas policiales.

Los hechos ocurrieron hacia las nueve de la noche del día 16, cuando los internos que se hallaban en un módulo se enfrentaron por unas discrepancias entre ellos, "de modo que un grupo se echó sobre el otro, lo que provocó la intervención de un vigilante que les anunció la apertura de un expediente".

Este hecho supondría que uno de los residentes recluidos podría ir a prisión, por lo que los jóvenes optaron por encerrarse y amontonar mesas y otros objetos, al tiempo que se negaban a salir de la habitación.

LA VOZ DE ALARMA La voz de alarma del vigilante hizo que acudieran todos los miembros del cuerpo de seguridad, nueve en total, indicó Bravo, al tiempo que se avisó a la policía. Según su versión, los vigilantes controlaron la situación y algunos sufrieron lesiones leves.

Para SGTEx, el "cambio de dirección que se ha producido en ese centro no es suficiente" para resolver los problemas que le aquejan. Asimismo, este sindicato presentó el 17 de julio una denuncia en la Inspección de Trabajo "por las continuas agresiones que sufren los trabajadores" y para pedir que se determine "si hay suficientes medidas de seguridad y medios de control".

AGRESION La Dirección General de Infancia y Familia confirmó que hubo "un incidente" y señala textualmetne: "Tres internos se encierran en una habitación con otro para agredirlo". Y añadió que para resolver el altercado intervinieron "los vigilantes y educadores, y al no salir los internos de la habitación, se solicitó la intervención de la Policía Nacional, que hace acto de presencia, y una vez solventada esa actitud se inician acciones propias del centro".

Esta misma fuente indicó que uno de internos "ya no es menor de edad y cabía la posibilidad de que, si se abre un expediente, pudiera ir a prisión", así como que ahora el centro funciona con normalidad.