Lejos de las aulas, con actividades lúdicas, al aire libre y con supervisión de profesores nativos. Así han ampliado y perfeccionado sus conocimientos de portugués un centenar de alumnos en dos campamentos del Programa de Inmersión Lingüística de la Consejería de Educación, con sede en la residencia del Instituto de Enseñanza Secundaria Nuestra Señora de Bótoa de Badajoz.

El primer campamento se desarrolló del 28 de junio al 9 de julio, y el 23 de este mes finaliza el segundo. Los escolares están divididos por grupos en función de su nivel. "Así es más ventajoso para ellos, porque no repiten conocimientos", según Marisa Bico, profesora del campamento.

David y Sara están en el grupo más avanzado. Ayer simulaban situaciones reales que podrían vivir en un viaje a Portugal: preguntar información, comprar un billete de autobús o pedir comida en un restaurante. Ambos participaban por primera vez en un campamento de este tipo y coincidían en que a partir de ahora sabrán manejarse mucho mejor cuando visiten el país vecino. Mientras, otro grupo aprendía a través de juegos hechos históricos y el resto, canciones populares.

Los escolares recibieron ayer la visita de la consejera de Educación, Eva María Pérez, quien se congratuló de que el número de plazas de los campamentos de portugués se haya tenido que duplicar con respecto a la pasada edición por el creciente interés que despierta el conocimiento de este idioma.

La consejera destacó la importancia de añadir al currículo académico de los alumnos el idioma portugués de cara a su futura inserción en el mundo laboral, al mismo tiempo que con esta actividad también se permite que los padres puedan conciliar la vida laboral y familiar en el verano.

El Programa de Inmersión Lingüística, con un presupuesto de 305.000 euros, consta de 14 campamentos (dos de portugués y 12 de inglés). En total, se beneficiarán 900 alumnos del tercer ciclo de Primaria y el primer ciclo de la ESO. La gran aceptación obtenida por los campamentos se traducirá el próximo verano en un aumento del número de plazas, aunque la consejera señaló ayer que se estudiará la posibilidad del "copago" por parte de las familias, ya que ahora la asistencia es totalmente gratuita.